Política

Espinosa-Saldaña sobre cuestión de confianza: “Hay un riesgo muy fuerte de una crisis política”

Pese a la jurisprudencia, Eloy Espinosa-Saldaña advirtió que ahora el TC cuenta con solo seis magistrados y necesitan cinco votos, según el nuevo Código Procesal Constitucional, para dar un veredicto sobre la ley impulsada por el Congreso, que modifica la cuestión de confianza y desequilibraría a los poderes del Estado.

Congreso insistiría con la ley que modifica la cuestión de confianza. Video: RTV
Congreso insistiría con la ley que modifica la cuestión de confianza. Video: RTV

El proyecto de ley que modifica la cuestión de confianza presentada por la Comisión de Constitución, liderada por la parlamentaria de Fuerza Popular Patricia Juárez, podría derrumbar cualquier intento de de diálogo entre el Ejecutivo y el Congreso.

René Gastelumendi, conductor de Grado 5 de Epicentro TV, recordó que esta autógrafa de ley, observada por el gobierno de Pedro Castillo, pretende acortar la cuestión de confianza y solo permitir al presidente presentar esta medida constitucional por temas afines al Ejecutivo y no de otros organismos, como el Legislativo o el Tribunal Constitucional (TC), lo cual atentaría con el equilibrio de poderes.

Eloy Espinosa-Saldaña señaló que el TC ya se pronunció dos veces sobre el tema. La última durante el mandato del expresidente Martín Vizcarra, que desencadenó la disolución del Legislativo por la elección exprés de los magistrados de la institución liderada por Marianella Ledesma.

El magistrado sostuvo que el panorama actual es diferente a raíz de la muerte de Carlos Ramos Núñez. Agregó que el nuevo Código Procesal Constitucional exige que un caso competencial se gane con cinco votos y no cuatro.

“Hay un elemento que hay que tomar en cuenta y es que ya no somos siete magistrados, somos seis y las dos votaciones fueron cuatro a tres″, aclaró.

Aunque existe jurisprudencia, Espinosa-Saldaña advirtió que este es un nuevo caso, por lo que los resultados podrían ser distintos.

“El Congreso va a insistir con su proyecto, el Gobierno va a ir planteando una cuestión de confianza o va a ir directamente al tribunal. La cosa no es sencilla en temas jurídicos”, precisó.

Asimismo, mostró su preocupación por los largos plazos (30 días hábiles) para que el Tribunal Constitucional de una posición sobre la ley que modifica la cuestión de confianza, que sería aprobada por insistencia por el Congreso y le daría cierto poder sobre el Ejecutivo hasta que el máximo organismo constitucional ofrezca un veredicto final.

“Hay un riesgo muy fuerte de una crisis política en el transcurso de este año. La cuestión de confianza tiene que ser libre, pero no la conclusión”, comentó.