Política

El Informante: Falsa fachada, por Ricardo Uceda

Lo que se ve por fuera de Los Cuellos Blancos del Puerto no corresponde a lo que hay adentro. Especialmente en la cúpula. Y sobre todo tras descubrirse pagos del dueño de TELESUP a ex magistrados del CNM.

Fachada. La famosa edificación artificial de TELESUP, cuyos pagos a magistrados del CNM están bajo investigación fiscal.
Fachada. La famosa edificación artificial de TELESUP, cuyos pagos a magistrados del CNM están bajo investigación fiscal.

Existen creencias comunes respecto de Los Cuellos Blancos del Puerto. El jefe sería César Hinostroza, el ex vocal supremo cuya extradición se pide a España. Según el requerimiento, buscaban controlar instituciones del Estado. Walter Ríos, el ex presidente de la Corte Superior del Callao, a cargo de los asuntos ilícitos de su jurisdicción, estaría en un nivel intermedio. Y había elementos de apoyo como los empresarios Mario Mendoza y Antonio Camayo, ahora en libertad tras autoinculparse como miembros de la estructura. Delataron a niveles superiores, ante todo a Hinostroza. Los acusadores del ex Fiscal de la Nación Pedro Chávarry aún no precisan su rol en la ambiciosa organización. Desde esta columna hemos sido escépticos con tal diagrama ofrecido a la opinión pública. Pero el descubrimiento de nuevos actos de corrupción puede confirmar o mejorar la hipótesis fiscal.

Lo de Aguila

Un hallazgo de la investigación puede dar un giro al entendimiento de las cosas. Trascendió parcialmente en algunos medios. Consiste en que el dueño de la universidad TELESUP, José Luna, pagó por conceptos inverosímiles a los miembros del CNM Guido Aguila e Iván Noguera. Como ambos eran parte de la mayoría del CNM (el primero, su presidente), procede la presunción de que el líder de Podemos Perú controlaba con su dinero al organismo que nombraba a los principales funcionarios de la ONPE, el Poder Judicial y el Ministerio Público. Algo mucho más grave que lo imputado hasta hoy.

Entre julio del 2016 y noviembre del 2017 el consejero Guido Aguila firmó contratos con TELESUP, cediendo a la universidad derechos de libros que produjo en ese lapso. Hizo diez y cobró 30 mil soles por cada uno. Eran recopilaciones comentadas de leyes y jurisprudencia, escritos a velocidad pasmosa. Dos de ellos fueron producidos en 17 días. En tres meses Aguila firmó cuatro contratos a cambio de 120 mil soles. El total percibido al cabo de año y medio fue 300 mil. Aguila niega que fueran pagos ilícitos. Su descargo figura en esta página.

Lo de Noguera

Los contratos fueron confirmados a la fiscalía por José Luna Jr., gerente de la universidad. Operaron cuando Aguila era Presidente del CNM y culminaron cuando este organismo nombró al físico Adolfo Castillo como jefe de la ONPE. Con Castillo al frente y con José Luis Cavassa como operador, José Luna esperaba inscribir a Podemos Perú. Lo consiguió.

En el caso de Noguera, el pago encubierto se habría producido a través de cesión de derechos para la publicación de libros por casi 900 mil soles. Difícilmente juristas de talla mundial ganan así por eso. También cuenta la adquisición de una casa en Pueblo Libre que compró su madre en 2010. Tiene 164 metros cuadrados. Noguera la vendió a TELESUP en 2016, cuando era miembro del CNM. Fue comprada en 155 mil dólares y vendida en 380 mil, un 250% más.

La reventa fue realizada cuando en Pueblo Libre el metro cuadrado oscilaba entre 1,300 y 1,700 dólares. La cotización fue más de 2,300 dólares el m2, algo aplicable a las zonas más caras de Lima. La universidad no registró la casa y la tiene sin uso. La reducida extensión no permite construir edificio o instalar algún local académico. Como en el caso anterior, el sobreprecio se explica como pago a la parcialidad de Noguera en el CNM.

El trío telesup

Un vocero de Noguera dijo para esta nota que el contrato de la casa se hizo a valor de mercado y con tasación. Añadió que no hay base para atribuir irregularidad a una operación entre particulares. El mismo vocero dijo no conocer otras operaciones entre Noguera y TELESUP.

En el pleno del CNM de entonces, con siete miembros, a Aguila y Noguera se sumaba un tercer consejero, Julio Gutiérrez, respecto del cual no se registran pagos de Luna, pero cuya proximidad a José Luis Cavassa –otro hombre pagado por el empresario– era conocida. Al grupo se le llegó a conocer como El Trío TELESUP.

El rol específico de Cavassa fue revelado por un audio de Walter Ríos diciéndole a su esposa que era el “brother” de Guido Aguila, alguien a quien tenía que recurrir para obtener del consejero un nombramiento que le favorecería en el Callao. Tras haber declarado que Cavassa era influyente en las decisiones del CNM, Ríos ha cambiado el matiz de sus manifestaciones, que en esta etapa tienden a exculpar al ex hombre fuerte de la ONPE en los años fujimontesinistas. Ríos ahora admite haber mentido en sus declaraciones iniciales como candidato a colaborador, algo que debilitará su posición y eventualmente la de la fiscalía.

Todo un giro

Así las cosas, probablemente las fiscales del Callao Rocío Sánchez y Sandra Castro lleguen a la convicción de que los pagos a Aguila y Noguera eran encubiertos. En ese caso el Ministerio Público tramitaría ante el Congreso una acusación constitucional. Si ello ocurre se confirmará que estuvimos prestando demasiada atención a ciertos personajes. Mientras Walter Ríos pedía “diez mil verdecitos” a un magistrado provinciano y solo recibía diez mil soles, un empresario habría comprado el sistema de designaciones de poderes del Estado. No es que Ríos o Hinostroza carezcan de importancia. Pero una cosa es apoderarse y poner en venta una Corte Superior entre las 29 que hay en el país y otra dominar la alta dirección del CNM.

Falta comprobar esta hipótesis. Un competidor de Luna por el control del CNM era Fuerza Popular, no sabemos si como bloque o si solo están comprometidos algunos congresistas. Los más visibles eran Héctor Becerril y Miguel Torres. ¿Llegaron a algo o solo fue un intento? De cualquier manera el hombre de TELESUP les ganó la partida.

Fachada. La famosa edificación artificial de TELESUP, cuyos pagos a magistrados del CNM están bajo investigación fiscal.

Guido Aguila

“Los contratos no tendrían por qué interpretarse como pagos indebidos. Están incluidos en mis declaraciones juradas, los libros entregados son todos de mi autoría y tengo entendido se publicaron. Se hicieron porque la universidad quería fortalecer su escuela de postgrado y producir trabajos de investigación, uno de los requisitos para que fuera acreditada”.