¡Habemus Presidente!Los presidentes que se han enfrentado políticamente y respetando la constitución a las fuerzas corruptas y antidemocráticas no han sido elegidos por nosotros: Paniagua y Vizcarra.,La corrupción es el mal endémico y las fuerzas políticas que prefieren mantener el statu quo, el quietismo, son cómplices. No hay vuelta que darle. El presidente Martín Vizcarra el domingo en la noche salió a ejercer el mandato por el cual juró –“no retrocederé ni un solo paso”– y los peruanos y peruanas de a pie hemos aplaudido. Lo que llama a una profunda reflexión es que, en los últimos veinte años, los presidentes que se han enfrentado políticamente y respetando la constitución a las fuerzas corruptas y antidemocráticas no han sido elegidos por nosotros: Paniagua y Vizcarra. Cuando elegimos presidentes escogemos a individuos que se fugan del país tras denuncias de corrupción; o que tienen controlado al Poder Judicial; o que creen que sus business privados son impolutos porque son de ellos o traicionan sus propuestas de campaña tras pactos bajo la mesa para aceitar su go-ber-na-bi-li-dad. “¿Qué hemos aprendido?”. A los cinco minutos de presentar la cuestión de confianza salen detrás de la tramoya un cerco de constitucionalistas a dar detalles jurídicos que, como siempre, llenan de bruma los laberintos de la normatividad priorizando el detalle jurídico-burocrático-constitucional: ¿el Derecho Positivo por encima de los Principios del Derecho? ¡Pero por supuesto! Así es como operan los hermanitos, los vladimiromontesinos, los perversos corruptos de cuello blanco y registro en el CAL. Eso les encantaba a las fuerzas del lado oscuro: hacernos creer que el inciso a, b o zeta, es más importante que nada en este mundo, motivo por el cual requiere de diez mil millones de años para ser modificado. Porque si fuera un inciso a, b o zeta que no los beneficia, lo cambian en un dos por tres. En la nocturnidad del domingo, sin esperar siquiera un amanecer, las Erinias salieron con sus mantos oscuros a señalar detalles domésticos y absurdos sobre “el mamarracho que ha presentado el presidente”. Si tan mamarrachentos les parecieron las propuestas de reformas, ¡por qué no propusieron cambios y sacar todo con urgencia! ¿Cómo es posible que el juez Hinostroza Pariachi siga caminando por las calles y usufructuando sus bienes mal habidos?, ¡cómo es posible que el Fiscal Chávarry se haya atornillado como Fiscal (de nuestra vituperada Nación)! Espero que los congresistas de izquierda no se queden atrás y voten firmemente por la aprobación de las propuestas del referéndum. Sé que algunos de ellos estuvieron detrás de la aprobación del cronograma, pero eso fue insuficiente. Hoy por hoy el pueblo pide a gritos en las calles, en las encuestas, en los medios un cambio. Es cierto que en los últimos días la frustración de seguir siendo espectadores de las inmundicias nos ha abatido. Pero, como siempre lo repito, tengamos en cuenta un verso del poeta Friedrich Hölderlin: “el pueblo se amodorra, pero el Destino no deja que se duerma”.