Los grupos REM y Pearl Jam lideran una petición formal para que la administración estadounidense haga público si utilizó su música para torturar a presos en Guantánamo, tal y como varios organismos internacionales han denunciado. La iniciativa está apoyada por Reprieve, una ONG británica especializada en la asistencia legal a reclusos, y para ello se servirá de la llamada "Ley de Libertad de Información" (FOIA en sus siglas en inglés), una ley federal, adoptada en 1966, que hace que la información del gobierno estadounidense sea accesible a todos. Entidades como Amnistía Internacional han denunciado en varias ocasiones que los presos de Guantánamo fueron torturados poniéndoles música a todo volumen, a lo que se le sumaban castigos físicos (la simulación de ahogamiento por agua, por ejemplo) y el endurecimiento de las condiciones de vida. "Hemos firmado esta campaña como muestra de nuestro completo apoyo al presidente (de Estados Unidos, Barack) Obama y a los líderes militares que han pedido el fin de las torturas y el cierre de Guantánamo. Mientras Guantánamo siga abierto, el legado de EEUU a lo largo del mundo continuará siendo la tortura", lamentó REM en el comunicado. El trío estadounidense se solidarizó con algunos de sus amigos músicos cuyas canciones podrían haber sido utilizadas como parte de las tácticas de tortura practicadas en Guantánamo "sin su conocimiento ni su consentimiento". "Bajo la administración Bush-Cheney, la tortura con música fue algo normal en Guantánamo y en las prisiones secretas que mantenía EEUU en Irak, Afganistán y en otros lugares del mundo", denuncia Reprieve en un comunicado. Según sus datos, una de las técnicas más utilizadas era poner la música a un volumen tan alto que incluso provocaba un daño en el tímpano que duraba varios meses, una práctica que todavía no figura como prohibida en el manual del Ejército La petición formal de información está previsto que llegue hoy a la CIA, el FBI, el Departamento de Defensa y al Departamento de Fuerzas Especiales, entre otros organismos. "El uso de música ensordecedora durante mucho tiempo para perjudicar a los prisioneros es obscena y contraria a los valores americanos y británicos", destacó la directora de Reprieve, Clare Algar. Entre los grupos de música que también se han sumado a esta petición están Trent Reznor, Jackson Browne, Rise Against, Rosanne Cash, Billy Bragg, y The Roots. EFE