Este país de Sudamérica se unirá al megapuerto de Chancay con un veloz ferrocarril y reducirá 10.000 kilómetros de su distancia con China
Brasil y China refuerzan su cooperación internacional mediante un proyecto ferroviario que conectará el megapuerto de Chancay, facilitando las exportaciones en la región.
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Brasil avanza en negociaciones clave con China para construir una infraestructura ferroviaria que promete fortalecer el comercio exterior de América Latina. La iniciativa busca unir el territorio brasileño con el megapuerto de Chancay, ubicado en Perú, reduciendo así en aproximadamente 10.000 kilómetros la distancia marítima que separa al país sudamericano de su principal socio comercial asiático.
Durante una entrevista reciente, la ministra de Planificación de Brasil, Simone Tebet, confirmó que China está "Muy interesada" en este ambicioso proyecto, que forma parte de un plan mayor de integración regional. El presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien visitará el país asiático en los próximos días, pretende consolidar acuerdos que favorezcan la infraestructura ferroviaria brasileña y refuercen las relaciones bilaterales.

El megapuerto de Chancay crea una ruta directa con el puerto de Shanghái. Foto: Perú Retail
El nuevo corredor ferroviario que acercará Brasil a China
El proyecto conocido como "ferrocarril Brasil Chancay" contempla la construcción de una ruta que conectará el estado de Acre, en la frontera con Bolivia, hasta el litoral atlántico en Bahía, enlazándose con la Ferrovia de Integração Oeste-Leste (FIOL Brasil). La obra será clave para facilitar las exportaciones de Brasil a China a través del megapuerto de Chancay, cuya inversión asciende a 1.300 millones de dólares y representa uno de los mayores desembolsos de Pekín en América Latina.
Simone Tebet aseguró que la delegación brasileña discutió las alternativas propuestas por el consorcio ferroviario chino, privilegiando una ruta que respete las reservas ambientales y las tierras indígenas de la Amazonía. El presidente Xi Jinping, quien participó en la inauguración del puerto de Chancay en noviembre pasado, respalda este proyecto como parte de la estrategia de expansión comercial de China en la región.
El impacto del nuevo tren amazónico
El trazado inicial sugerido por las compañías chinas atravesaba zonas de alta sensibilidad ecológica en la Amazonía. Sin embargo, tras la objeción brasileña, se optó por un recorrido más al sur, minimizando el impacto ambiental y respetando territorios indígenas.
La dependencia histórica del puerto de Santos, que concentra cerca de un tercio de las exportaciones de Brasil, ha generado cuellos de botella en el comercio exterior. La conexión ferroviaria hacia el megapuerto de Chancay no solo aliviará esta presión logística, sino que también permitirá abrir nuevas rutas de exportación hacia Asia, fortaleciendo sectores como el de la soja, mineral de hierro y carne bovina.
La transformación de la relación comercial China-Brasil
La alianza para desarrollar el tren Brasil China forma parte de un movimiento estratégico más amplio que busca consolidar la inversión China en América Latina. El comercio Brasil China superó los 160.000 millones de dólares en 2023, posicionando a Pekín como el mayor socioeconómico del país sudamericano.
Con este nuevo corredor ferroviario, Brasil no solo diversificará sus opciones de exportación, sino que también reducirá tiempos y costos en el transporte de mercancías. La infraestructura ferroviaria resultante reforzará la integración comercial Brasil China, mientras abre nuevas oportunidades para mejorar la competitividad brasileña en el mercado internacional.