Este es el único país del mundo que lleva casi 2 siglos colgando su bandera al revés
La independencia de este país se dio tras un concierto de música clásica y es el único del mundo cuya bandera no sigue literalmente la orden de su constitución.
En julio, Bélgica celebra su fiesta nacional en la que se conmemora el juramento del príncipe Leopoldo en 1831 a una nueva constitución que lo convirtió en el primer monarca del país europeo.
El festejo de esta efeméride consiste en un desfile en Bruselas con banderas izadas en los edificios públicos, donde destaca una anomalía histórica: llevan casi dos siglos colgando su estandarte nacional al revés. Este día es un feriado nacional, por lo que es normal ver familias reunidas en torno a almuerzos, conciertos, parques y jardines, que concluye con un show de fuegos artificiales.
¿Cuál es el curioso origen de la bandera de Bélgica?
Bélgica, como país independiente, empezó a originarse el 25 de agosto de 1830 tras una ópera que acabaría con la separación de los Países Bajos.
Después de que Napoleón Bonaparte fuera derrotado en la batalla de Waterloo, Europa en 1830 estaba al borde del estallido. A principios de agosto, Luis Felipe de Orleans ascendió al trono francés después de que la Revolución de Julio derrocara a Carlos X, cuando las protestas liberales también se extendieron a Italia, Polonia y Alemania.
Aquella noche de finales de agosto, La Monnaie de Bruselas representó una obra de teatro del francés Daniel Auber, 'La muta de Portici', inspirada en la Revolución napolitana de 1647, liderada por el pescador Masaniello, contra los impuestos recaudados por la corona española.
Esa ópera inició una revolución contra la soberanía del rey holandés Guillermo de Orange por la falta de independencia política y cultural del reino belga.
Los colores de la bandera de Bélgica
Tras la insurrección, se escogieron los colores de la bandera de Francia, lugar histórico de revoluciones, pero pronto decidieron cambiar por los de la Revolución brabanzona de los años 1787-1790, una revuelta surgida también en Bruselas que dio origen a los efímeros Estados Unidos de Bélgica.
Esa primera bandera se fue convirtiendo en la oficial que conocemos hasta ahora con franjas horizontales de color rojo, amarillo y negro, según se dispuso en el artículo 193 de la Constitución de Bélgica y proclamada en 1831.
Sin embargo, el Gobierno provisional decretó el 23 de enero de 1831, con la Constitución rigiendo, que los colores debían disponerse en vertical y no en horizontal debido a que era muy parecida a la de los Países Bajos, reino del que se estaban separando. Asimismo, el lado del mástil debía ser rojo.
Bélgica, como país independiente, empezó a originarse el 25 de agosto de 1830. Foto: EFE
Irónicamente, la Marina de la incipiente nación empezó a usar la bandera de la forma contraria: el mástil para el lado oscuro. La práctica se fue extendiendo en el país y se volvió la predominante. Por lo que el Gobierno, nuevamente, decretó el 15 de septiembre de 1931 el nuevo orden de colores: negro, amarillo y rojo.
El artículo 193 de la Constitución nunca fue modificado y todavía hoy, 192 años después, sigue estipulando que los colores de su estandarte nacional son rojo, amarillo y negro: Bélgica es el único país del mundo cuya bandera no sigue literalmente la orden de su Constitución.
Con información de EFE