Una nueva generación que se enfrentará en presidenciales
Chile. Gabriel Boris y Sebastián Sichel se proyectan para llegar a la presidencia tras ganar las primarias de sus partidos.
Por: Eduardo Quintanilla
Las elecciones primarias para la presidencia de Chile tuvieron varias sorpresas. En primer lugar, la coalición de izquierdas Apruebo Dignidad obtuvo más votación que la alianza de derechas Chile Vamos, de Sebastián Piñera. Ambas obtuvieron respectivamente 1,709.121 y 1,317.403 votos, cifras que representan el 56,5% y 43,5%, trece puntos de diferencia a favor de la coalición de izquierdas. Un resultado que avizora una posible segunda vuelta programada para el 19 de diciembre de 2021.
Factor Boric
Gabriel Boric fue el claro ganador. Un buen debate, su deslinde con gobiernos autoritarios como los de Cuba y Venezuela, y el apoyo de alcaldes jóvenes como los de Viña del Mar, Maipú, y la excandidata a la región de Santiago Karina Oliva lo favorecieron ante Daniel Jadue. Ambos obtuvieron 60,1% y 39,9%, respectivamente.
Con solo 35 años, el candidato pidió a la ciudadanía chilena que no tenga miedo a la juventud si es que se trata de cambiar el país. Además, centró su retórica en la necesidad de descentralizar Chile, pues él nació en Punta Arenas, en el extremo sur del país, el 11 de febrero de 1986.
El reto de Sichel
En cuanto a la derecha, los candidatos Joaquín Lavín, Mario Desbordes e Ignacio Briones fueron derrotados por el independiente Sebastián Sichel, de 43 años, quien aseguró antes de la primaria haberse distanciado de Sebastián Piñera.
Durante el segundo gobierno de Piñera asumió como vicepresidente de la Corporación de Fomento de la Producción (Corfo) y en junio de 2019 asumió como ministro de Desarrollo. Un año más tarde fue designado como presidente del BancoEstado.
Entre sus principales ideas para un eventual futuro gobierno, Sichel prometió disminuir la burocracia, facilitar los emprendimientos y mejorar la red de protección social.