Mundo

Vendedor de paltas destruye su mercadería tras ser multado por la Policía en Colombia [VIDEO]

El ambulante prefirió botar la fruta antes que su carrito sea decomisado por la Policía tras violar la cuarentena.

La necesidad y el hambre obligó al vendedor ambulante a salir de su casa para llevar dinero a su familia. (Foto: Captura)
La necesidad y el hambre obligó al vendedor ambulante a salir de su casa para llevar dinero a su familia. (Foto: Captura)

El video que muestra la impotencia de un humilde vendedor de paltas siendo multado por la Policía ,tras violar la cuarentena en Colombia, conmovió a todos en redes sociales. Ya que la necesidad y el hambre lo obligó a salir de su casa para llevar dinero a su familia.

Sin embargo, las autoridades, haciendo cumplir las disposiciones del Gobierno en el marco de la pandemia, le impusieron al comerciante una multa de 936.323 pesos por ofrecer sus productos en la calle.

En la grabación compartida en Twitter se aprecia a Octavio Agudelo, sin poder creer que dos efectivos policiales, un hombre y una mujer, le estén aplicando una sanción económica en medio de la crisis que atraviesa su familia por la COVID-19.

“Mi familia y yo vivimos y comemos de esto. Me parece injusto lo que hacen con los pobres. Si no vendo mi familia y yo no comemos”, señaló el consternado comerciante.

El comerciante, que en la parte inferior de su carrito también vendía mangos en una caja de cartón, terminó superado por la ira. Ni bien se percató que un camión de la Policía llegaba para confiscarle sus productos, él decidió destruirlos con sus propias manos.

A raíz de la divulgación del video, la Personería del municipio de Pereira contactó al comerciante para ofrecerle apoyo en garantizar sus derechos ante las autoridades. Los vecinos de la zona también lo ayudaron económicamente.

La crítica situación económica que vive Colombia ha empujado a muchos vendedores a salir a las calles nuevamente, aún en pleno aislamiento por la COVID-19. Muchos de ellos se arriesgan a ser multados e incluso a ser llevados a una estación de Policía.