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“Tengo coronavirus y ahora ustedes también”: hombre es encarcelado por toserle a policías

El sujeto fue sentenciado a diez semanas de prisión por agredir a dos oficiales, una de los cuales estaba embarazada. El hecho ocurrió en Leiden, Holanda.

El individuo se negó a recibir una prueba de alcoholemia. Fuente: foto referencial.
El individuo se negó a recibir una prueba de alcoholemia. Fuente: foto referencial.

Un hombre de Leiden (Holanda) fue arrestado por las autoridades locales y sentenciado a pasar diez semanas en prisión tras toser en la cara y escupir a dos agentes de policía mientras aseguraba estar infectado con el nuevo coronavirus. De acuerdo con los oficiales, el hombre se encontraba en estado de ebriedad.

El hecho se registró entre las últimas horas del 17 de marzo y las primeras del día siguiente. Dos efectivos policiales vieron a un hombre conduciendo un automóvil de manera errática, según reporta el canal Russia Today. Tras ser detenido por los agentes, el sujeto, quien se mostraba aparentemente intoxicado, se negó a recibir una prueba para detectar el alcohol en su sangre.

De acuerdo con el Ministerio Público, el individuo gritó: “Tengo coronavirus y ahora ustedes también”, tras lo cual procedió a toser en los rostros de ambos oficiales y a escupirlos. Una de los dos efectivos era una mujer embarazada, según reporta el portal Unity de Holanda.

Posteriormente, las pruebas revelaron que el hombre, de 23 años, no estaba infectado con el COVID-19. Esto no evitó que fuera sentenciado a diez semanas de cárcel tras ser hallado culpable de asalto y amenazas de muerte. El sujeto también fue prohibido de conducir por 10 meses y deberá compensar los daños realizados a los policías.

El juez a cargo del caso espera que este fallo sirva como una señal para que no se produzcan incidentes similares a futuro.

Holanda registra hasta el momento más de 3600 casos del nuevo coronavirus. Con el fin de contener la expansión de la enfermedad, el gobierno de los Países Bajos decretó la semana pasada el cierre de lugares como escuelas, restaurantes e incluso de los cafés donde se vende marihuana.