George W. Bush, presidente 43 de Estados Unidos pidió una reforma a las leyes migratorias, a las que tildó de "obsoletas e ineficaces".,El expresidente de Estados Unidos George W. Bush aseguró que la inmigración es una "bendición y una fortaleza", en momentos en que los congresistas se enfrentan con Donald Trump por el financiamiento del muro fronterizo con México. El político republicano, que se ha mantenido fuera de las focos desde que dejó la presidencia en 2009, no criticó explícitamente a Trump ni a su política sobre el muro. PUEDES VER “Trump no es un supremacista blanco”, dice la Casa Blanca Durante una ceremonia de nacionalización para 51 nuevos ciudadanos estadounidenses en el Centro Presidencial George W. Bush, en Dallas, Texas, el presidente número 43 de Estados Unidos pidió una reforma a las leyes migratorias, a las que tildó de "obsoletas e ineficaces". Pero también enfatizó que las "fronteras no son arbitrarias y necesitan ser respetadas". "En medio de todas las complicaciones de la política, nunca olvidemos que la inmigración es una bendición y una fortaleza", dijo Bush. "Espero que los responsables en Washington puedan reducir la retórica, dejar de lado la política y modernizar nuestras leyes de inmigración pronto", añadió. Los comentarios de Bush se producen cuando el Congreso y la Casa Blanca se preparan para una pelea judicial luego que Trump declarara una emergencia nacional para financiar la construcción de un muro en la frontera entre Estados Unidos y México. El Congreso se ha negado a asignar dinero para el proyecto, que busca frenar la inmigración ilegal y fue una promesa central de la campaña electoral del republicano en 2016. En una vergonzosa reprimenda a Trump, algunos republicanos se unieron a los demócratas al votar la semana pasada contra su declaración de emergencia. Trump, sin embargo, vetó ese intento el viernes. Sus opositores podrán ahora, no obstante, pelear la medida en la corte.