
Caída de un árbol en el Amazonas deja al descubierto siete misteriosas esferas con restos humanos y de animales en su interior
El misterioso hallazgo surgió tras la caída de un árbol en Fonte Boa, donde se encontró esferas ancestrales y en su interior se halló restos de humanos y de animales.
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En una remota zona de la Amazonía brasileña, se suscitó un sorprendente hallazgo que impactó a los arqueólogos e investigadores. La caída de un árbol ha revelado un secreto milenario bajo la tierra húmeda de Fonte Boa, Brasil, dentro del sitio arqueológico conocido como Lago do Cochila. Bajo sus raíces se hallaron siete urnas de cerámica, y al menos dos de ellas eran de gran tamaño.
Las esferas estaban enterradas en una profundidad de 40 centímetros, y dentro de ellas los investigadores encontraron restos óseos humanos mezclados con huesos de peces y quelonios. Se estima que en el territorio hace siglos eran viviendas y podrían haber pertenecido a una civilización ajena a los estilos ya registrados, como la Tradición Policroma Amazónica.
Esferas misteriosas fueron halladas bajo las raíces de un árbol en la Amazonía
Alrededor de siete urnas prehispánicas se hallaron en el Amazonas brasileño, luego de la caída de un árbol en el municipio de Fonte Boa, dentro del sitio arqueológico de Lago do Cochila. Tras la caída, sus raíces dejaron al descubierto las esferas, algunas de gran tamaño, enterradas a 40 centímetros de profundidad.
Dentro, los arqueólogos hallaron restos humanos, huesos de peces y de tortugas. Las esferas no traían tapas de cerámica visibles, lo que se intuye que fueron selladas con materiales orgánicos ya descompuestos. Además, la investigación indicó que podrían ser prácticas funerarias vinculadas a elementos rituales o alimentarios.
Geórgia Layla, arqueóloga que lideró la investigación, señaló que algunas piezas fueron elaboradas con arcillas verdosas poco comunes, que se detectaron anteriormente en yacimientos del Alto Solimões. El descubrimiento abre la posibilidad de que se trate de una tradición directamente relacionada con rasgos de la Tradición Policroma Amazónica.
Un descubrimiento conjunto entre pobladores e investigadores
A la investigación, se sumó la cooperación entre arqueólogos y habitantes locales del Amazonas. En específico, la comunidad de São Lázaro do Arumandubinha participó activamente en el proceso de excavación, incluso construyendo una estructura elevada de madera y lianas para acceder a las urnas.
Para lograrlo, se implementó una técnica innovadora que implicó una excavación de 3,20 metros de profundidad. En este proceso, el traslado hacia el Instituto Mamirauá implicó extensas jornadas de navegación en canoa y embalaje artesanal, con un recorrido de entre 10 y 12 horas, dependiendo del caudal del río. Para proteger las esferas, se emplearon capas de plástico, vendas de yeso, envolturas de burbujas y soportes de madera.