Ciencia

Estudio revela la razón por la cual las personas nocturnas viven menos que el resto

Científicos identificaron el motivo detrás de esta tendencia tras estudiar la salud de más de 23.000 personas.

Un estudio en Finlandia ha encontrado que las personas noctámbulas tienden a vivir menos tiempo que las madrugadoras. Foto: Thriving Now
Un estudio en Finlandia ha encontrado que las personas noctámbulas tienden a vivir menos tiempo que las madrugadoras. Foto: Thriving Now

El popular refrán "a quien madruga, Dios le ayuda" puede tener algo de razón, ya que un estudio científico llevado a cabo en más de 23.000 individuos, en Finlandia, ha encontrado que las personas madrugadoras tienden a vivir más tiempo que los noctámbulos, como se les dice a quienes realizan la mayoría de sus actividades durante la noche.

Si bien no es la primera vez que se ha identificado esta tendencia, en esta oportunidad, los científicos a cargo de la investigación, pertenecientes a la Universidad de Helsinki, parecen haber descubierto el motivo detrás de esta predisposición.

Los hallazgos del estudio, publicado en el portal Chronobiology Interntional, fueron posibles tras analizar encuestas tomadas a lo largo de 37 años, desde 1981 hasta 2018.

Mayor tendencia a beber y fumar

En un primer análisis de la información, en el que solo se consideró la edad y el sexo de los participantes, los autores se percataron de que, aquellas personas que eran "completamente" noctámbulas, tenían un 21% más riesgo de muerte por cualquier causa en comparación con quienes eran "completamente" madrugadoras.

En un segundo análisis de la data, sin embargo, los autores mejoraron sus resultados luego de que incluyeran otros factores que podían afectar el riesgo de mortalidad de los seres humanos, tales como el índice de masa corporal (IMC), la duración del sueño, nivel educativo, tasa de enfermedades crónicas y, finalmente, el consumo de alcohol y tabaquismo (frecuencia y cantidad).

Tras ello, el equipo encontró que la mayor parte del riesgo de muerte de los individuos nocturnos se podía atribuir a un mayor consumo de alcohol y tabaco, ya que, cuando no se tomaba en cuenta estas variables, la tasa de mortalidad de este grupo era muy similar a las de las personas matutinas que no bebían ni fumaban.

La investigación también halló que las tasas de muerte relacionadas con alcohol y cáncer de pulmón o de las vías respiratorias eran más altas entre las personas nocturnas que las madrugadoras, en un 92% y 78%, respectivamente.