Ancestros de los humanos ya andaban en 2 patas cuando vivían en los árboles, sugiere estudio
La investigación sugiere que los chimpancés comenzaron a caminar en dos patas para alcanzar los frutos más altos, no para desplazarse sobre el suelo.
Desde hace varias décadas, se ha pensado que los orígenes del bipedismo humano —caminar erguido sobre dos piernas— está relacionado con la reducción significativa de árboles en los bosques antiguos. Sin embargo, un nuevo estudio publicado en Science Advances sugiere que nuestros ancestros adoptaron este rasgo para buscar comida en las copas de los árboles, no para desplazarse en el suelo.
Dado que los chimpancés son nuestro pariente vivo más cercano (99% de similitud genética), el equipo de científicos estudió los comportamientos de ejemplares salvajes en el valle de Issa, al oeste de Tanzania, para explorar si la apertura de este tipo de paisaje —una mezcla de terreno abierto y seco con pocos árboles y manchas de bosque denso— podría haber fomentado el bipedismo en los homínidos.
Durante 15 meses, los investigadores estudiaron a 13 chimpancés que vivían en el valle de Issa en el oeste de Tanzania, un ambiente similar al que habitaron los ancestros de los humanos.
Así, observaron que, incluso en un ambiente abierto, la proporción de tiempo que los chimpancés pasaron en el suelo fue similar a la registrada previamente para otras poblaciones de simios que vivían en áreas densamente boscosas.
“Tenemos muchos menos árboles, pero [los chimpancés] no son más terrestres”, dijo el coautor del estudio Alex Piel, antropólogo del University College London (UCL).
Luego, el equipo combinó los datos de las diferentes zonas de Issa y analizó con qué frecuencia los chimpancés se pararon o se movieron sobre dos pies.
Los resultados muestran que, si bien el comportamiento bípedo representó menos del 1% de las posturas registradas, solo el 14% de esas ocasiones se relacionó con los chimpancés en el suelo.
“La mayor parte del tiempo que están en dos patas se da en los árboles”, indicó Piel. Asimismo, añadió que este comportamiento, al menos entre las ramas, parece estar más comúnmente relacionado con la búsqueda de comida.
Los autores afirman que sus hallazgos contradicen las teorías ampliamente aceptadas que sugieren que fue un entorno abierto y seco de sabana lo que animó a nuestros parientes humanos prehistóricos a caminar erguidos, y en su lugar sugieren que podrían haber evolucionado para caminar sobre dos pies para desplazarse por los árboles.
“Nuestro estudio sugiere que la retirada de los bosques a finales del Mioceno-Plioceno, hace unos cinco millones de años, y los hábitats más abiertos de la sabana no fueron, de hecho, un catalizador para la evolución del bipedismo. En cambio, la búsqueda de árboles que produjeran alimentos fueron un probable impulsor de este rasgo”, agregó el antropólogo.
Caminar sobre dos pies es un rasgo definitorio de los humanos en comparación con otros grandes simios, que “caminan con los nudillos”. Sin embargo, a pesar de su estudio, los autores afirman que sigue siendo un misterio por qué los humanos empezaron a caminar sobre dos pies.
Con información de The Guardian y Europa Press.