Pfizer anuncia que su vacuna contra la COVID-19 es segura para niños de entre 5 y 11 años
La farmacéutica solicitará la autorización de Estados Unidos para comenzar la inoculación contra la COVID-19 para los niños en ese rango de edad.
Este lunes 20 de setiembre Pfizer y BioNTech informaron que su vacuna contra la COVID-19 —hasta el momento aprobada para mayores de 12 años— es efectiva para los menores de 5 a 11 años, por lo que solicitarán la autorización de la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos) en Estados Unidos para empezar a inmunizar a este grupo de edad. Esto se da en un contexto en el que las escuelas americanas han iniciado sus clases presenciales y que la variante Delta, una de las más contagiosas, sigue siendo predominante en el país.
Según informaron en un comunicado, aplicaron dosis más bajas de la vacuna contra el coronavirus (un tercio de la cantidad regular que se administra a los grupos de mayor edad) en alrededor 2.268 niños de preescolar y de primaria. Bill Gruber, vicepresidente senior de Pfizer, precisó que la respuesta de los menores fue favorable y que, tras la segunda dosis, estos desarrollaron anticuerpos tan abundantes como los adolescentes y los adultos jóvenes.
Asimismo, la farmacéutica señaló que la inyección es segura, ya que no se registraron efectos secundarios graves, solamente temporales y leves, como dolor en los brazos, fiebre o malestar. Estos efectos son “en general comparables” a los observados en personas de 16 a 25 años, afirmaron los laboratorios.
“Creo que hemos dado en el clavo”, subrayó Gruber al medio de noticias The Associated Press. El especialista comunicó que tras este estudio, las empresas solicitarán a fin de mes a la FDA el permiso para inocular a los menores de entre 5 a 11 años.
Por su parte, Peter Marks, jefe de la FDA, indicó que una vez que Pfizer entregue los resultados de su investigación, su agencia evaluará los datos “con suerte en cuestión de semanas” y tomará una decisión. La FDA exigió a la farmacéutica un estudio de puente inmunológico para comprobar los niveles de anticuerpos que desarrollan los niños tras ser inmunizados. De igual forma, Marks indicó también que estas pruebas pediátricas deben ser lo suficientemente grandes como para poder descartar complicaciones mayores en los menores.
Finalmente, Gruber, el especialista de Pfizer, manifestó que de ser autorizada la inoculación a este grupo etario se los vigilará cuidadosamente para detectar posibles riesgos raros. Del mismo modo, otras empresas fabricantes de vacunas en Estados Unidos, como Moderna, se encuentran realizando también investigaciones en los más pequeños.