¡Una idea original! Desde pequeño, un perro bautizado con el nombre de Denali acudía a sus citas en el Hospital Veterinario de Glove Cities, ubicado en New York (Estados Unidos). Por esta razón, los doctores lo atendían con mucho cariño y se aseguraban que tuviera un excelente trato. Tal como quedó demostrado recientemente en un video que publicaron en Facebook, luego de que este tuvo un problema que puso en riesgo su vida.
De forma regular, la mujer se encargó en cumplir con los chequeos médicos que le programaban a su querida mascota. Un día, notó que algo malo había pasado y se comunicó de emergencia con los trabajadores del lugar.
“La mamá de Denali llamó preocupada porque no estaba comiendo, lo cual es muy poco común en él. Incluso estaba rechazando sus bocadillos favoritos. Después de un examen físico, la Dra. Sharpe decidió hacer radiografías en las que encontró un cuerpo extraño, una roca”, comentó Jillian, gerente de marketing de la veterinaria, en redes sociales.
Debido a que se comió una piedra de casualidad, el indefenso can tuvo que permanecer internado hasta su recuperación. Foto: Hospital Veterinario de Glove Cities/ Facebook
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Al parecer, el can de raza husky siberiano se comió una piedra que terminó en su sistema. Fue entonces que esperaron un tiempo para ver su mejoría, pero ocurrió lo contrario y lo sometieron a una cirugía. Esto lo obligó a estar internado en la sala de cuidados intensivos para conseguir su recuperación bajo la supervisión de los especialistas.
Con el transcurso de las horas, Denali se mostró ansioso y desesperado al ser monitoreado casi a diario. Por ello, pensaron en una rápida solución para que cambiara su actitud. De pronto, armaron un muñeco con traje de veterinario para que le hiciera compañía.
“Para Denali, menos, es más. Con el uso del ‘veterinario improvisado’, parecía que sentía que alguien todavía estaba con él, pero no demasiado como para ponerlo ansioso o nervioso. Tan pronto como se construyó el ‘veterinario improvisado’ (usando una vía intravenosa) palo, trapeador e imagen de su veterinaria favorita, la Dra. Sharpe se instaló de inmediato. Parecía estar hipnotizado por eso. Permaneció junto a él durante toda su estadía”, manifestó Jillian.
Debido a que se comió una piedra de casualidad, el indefenso can tuvo que permanecer internado hasta su recuperación. Foto: Hospital Veterinario de Glove Cities/ Facebook
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Afortunadamente, todo salió a la perfección y el animal tuvo un buen comportamiento hasta finalizar su tratamiento. “Estamos muy agradecidos de decir que Denali está bien después de la cirugía ¡Está en casa descansando con su familia y manteniéndose alejado de las rocas!”, añadió.
Sin dudarlo, divulgaron estas tiernas imágenes en su cuenta oficial de Facebook y TikTok. De inmediato, alcanzaron más de 256.400 reproducciones que lo volvieron tendencia. Además, los usuarios aprovecharon para felicitarlos por su gran labor.
Te sorprenderá. A través de TikTok se pudo conocer una impresionante historia protagonizada por un perrito y su dueño. Todo comenzó cuando el joven tuvo que llevar a su perrito Thor al veterinario para que sea atendido; sin embargo, él también fue tratado al desmayarse frente a su mascota.
En las imágenes compartidas por la cuenta @isabelhschmidt, se puede observar el preciso momento en que la médica veterinaria coloca al perrito en la mesa quirúrgica para comenzar con el tratamiento, pero a penas inicia con la primera inyección, el dueño del animalito sorprende al perder brevemente el conocimiento. Él no pudo soportar ver la sangre que salía de la patita de su mascota, por lo que se desmayó y cayó sobre el can. Esto impidió que la médico pudiera continuar con la atención al paciente perruno.
Un desenlace inesperado. A través de YouTube y otras redes sociales, se conocen historias de personas que se convierten en héroes por un día. En esta ocasión, un conductor ayudó a las autoridades a rescatar a unos animales que estaban encerrados en una casa donde se desencadenó un incendio. Sin embargo, jamás imaginó que uno de las mascotas iba a tener una rápida acción para salvar su vida.
Como todos los días, Justin Steinmetz iba con dirección a su trabajo por una carretera ubicada en el condado de Berks, Estados Unidos. De pronto, vio una gran humareda a la distancia y se detuvo para tratar de averiguar la situación. Tras ver que se trataba de un siniestro, se comunicó con el 911 para pedir refuerzos, mientras apagaba el fuego con una manguera de jardín. Luego de unos minutos, notó la presencia de un can que corrió por el patio para poder salir.
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Pese a que miles se reían a carcajadas con sus divertidas conductas, los dueños de un perrito de nombre Leo solo mostraban preocupación, pues creían lo peor. La historia de este simpático animalito se ha viralizado en TikTok y otras redes sociales.
Leo a menudo aplastaba su hocico sobre las cosas. Además, sus dueños notaron que se quedaba dormido con la nariz presionada contra los barrotes. Sin embargo, desconocían la razón de este accionar. Los dueños de Leo contaron que gastaron cientos de dólares en consultas médicas con veterinarios para asegurarse de que su hábito no fuera un síntoma de daño cerebral. Por fortuna, y según The Mirror, el can fue diagnosticado únicamente como un “animalito bobo y saludable”, esto sorprendió a sus amos.