“MVLL me descubrió como malvado",Curtido actor dicta Taller de Malvados donde nada como pez en el agua. Curtido actor dicta Taller de Malvados donde nada como pez en el agua. Por Cecilia Castillo S. Fotos: Rocío Orellana. Uno, dos tres. Juan Manuel Ochoa o "El Jaguar" emprende nueva aventura como director. Con él, un grupo de jóvenes actores se convierten en vampiros para el lente. "¿Cómo hace para desprenderse de su personaje?", le preguntaron a Anthony Hopkins sobre su impecable caracterización de Hannibal Lecter en El Silencio de los Inocentes y éste respondió: "Mastico un par de orejas humanas y me quedo tranquilo". Con esta anécdota, Juan Manuel Ochoa da la bienvenida a sus alumnos al Taller de Malvados, donde actores con experiencias buscan adentrarse en el perfil psicológico y físico del "malo de la película". "El primer malvado que hice en la televisión fue 'El Místico', en el relanzamiento de Gamboa, en dos capítulos de lujo escritos por Mario Vargas Llosa. Por primera vez en esa teleserie, el antagonista ganó y el protagonista mordió el polvo de su derrota. Allí me di cuenta de que ese era mi camino en la actuación. De alguna forma, el laureado escritor me descubrió como malvado", dice Ochoa. Agrega: "Recuerdo que en ese capítulo actué con Marilda Castro, Ricardo Blume y José Enrique Mavila, un elenco de lujo. Yo era un principiante, pues estamos hablando de principios de los ochenta. En la historia secuestro a Marilda y después de una larga persecución, ella deja a todos perplejos revelando que se había enamorado de mí". Desde entonces, muchos malvados han cruzado por la azarosa vida profesional de Ochoa. "Definitivamente en la pantalla grande 'El Jaguar' de La ciudad y los perros es un ícono, personaje que llegó después de Gamboa. A partir de ahí, perdí mi nombre, por donde voy me gritan ‘Jaguar’ y es algo con lo que aprendí a convivir". "El bueno siempre es predecible, el malvado tiene muchas aristas, con licencia para hacer lo que le da la gana. Pero los hay malvados buenos y otros de pacotilla, aunque en este mundo uno tiene que hacer de todo, por oficio. Para mí, los que se ubican en el segundo grupo son los policías corruptos y abusivos que me ha tocado caracterizar. No se les permite aportar nada y, claro, no ejercen gran fascinación". Ochoa señala que el proceso de caracterización de un villano comienza con una imagen: "A partir de eso busco sus movimientos, cómo gesticula, camina y habla. Claro que después de esa carga sobre el escenario es difícil que no te lleves algo de ese personaje a casa, entonces lo que hago es tomarme cuatro tragos y gritar". Con esa misma concluyó que podría invitar a su Taller de Malvados a "Kuczynski y Del Castillo, tremendas joyas", asiente. Datos CURSO. Las inscripciones para el Taller de Malvados está abiertas en la Asociación de Artistas Aficionados, al 4280432 ó 97263116. REGRESO. Desde el 5 de noviembre lo veremos como "El Mesías" en la cuarta parte de La Gran Sangre. "Una especie de Bin Laden con Hugo Chávez", describe.