En medio de la reciente alerta epidemiológica emitida por el Ministerio de Salud (Minsa), César Munayco Escate, titular del Centro Nacional de Epidemiología, Prevención y Control de Enfermedades, confirmó que en las últimas semanas las regiones de Loreto, San Martín y Piura han presentado un alza leve de casos de dengue debido a las variaciones del cambio climático.
Señaló además que, en Loreto, los distritos de Lagunas y Yurimaguas son los que tienen un incremento importante de casos de dengue. Agregó que en San Martín sucede lo mismo en Moyobamba y Tarapoto. En el caso de Piura, dijo que el aumento no sería alto en comparación con las otras regiones.
Munayco comentó también que, en lo que va del 2024, los serotipos DEN-1 y DEN-2 son los causantes del incremento de los casos de dengue en el Perú.
Sin embargo, ahora es el serotipo DEN-3 el que “estaría ganando mayor terreno” en zonas de la selva. Del mismo modo, se cree que también podría ingresar a la costa a partir del 2025.
El viceministro de Salud Pública, Ricardo Peña Sánchez, respondió a La República que la campaña de vacunación contra el dengue no es una medida de control de brote. También aclaró que en una epidemia, la vacuna no va a ser que disminuyan los casos o que se reduzca la transmisión, dado que el objetivo de la vacuna es proteger en el mediano y largo plazo a las poblaciones que son más afectadas en grupos etarios.
Peña dijo que a largo plazo se verán los resultados y que se realizará un estudio de efectividad que consistirá en ver el comportamiento de los inmunizados para saber si desarrollan formas severas de la enfermedad.
El epidemiólogo Antonio Quispe explicó a La República que la campaña de vacunación contra el dengue, que está realizando el Minsa, es insuficiente y tardía; además que no se cuenta con vacunas suficientes para todos.
Se debe señalar que en esta primera etapa se estará vacunando a 222.750 niños y adolescentes de las regiones de Piura, Tumbes, Loreto y Ucayali. Posteriormente, estarán recibiendo una segunda dosis pasados los tres meses. “En otras palabras, es una curita a un problema enorme que implica y se deriva de la ineptitud y la gran irresponsabilidad del Minsa”, dijo Quispe.