Una carretera que se origina en la ciudad de Iquitos, en la región de Loreto, y enlaza la frontera entre Perú y Colombia está generando tensiones entre las comunidades indígenas que residen en la zona de influencia y el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), responsable de la ejecución del proyecto.
Se trata del proyecto Bellavista-Mazán-Salvador-El Estrecho que se divide en 4 tramos, dos los cuales el Tramo I ya está construido desde el año 2021 y el Tramo II se encuentra en elaboración del Estudio Definitivo de Ingeniería. Su construcción inició hace 7 años.
La carretera que une Perú con Colombia tendrá 4 tramos. Foto: difusión
Según autoridades locales, esta carretera, cuya inversión es de más de S/1.546 millones, afectaría directamente los territorios indígenas y las Áreas de Conservación Regional (ACR), Maijuna Kichwa y Ampiyacu Apayacu.
Estas áreas sustentan la vida de los pueblos indígenas Maijuna, Kichwa, Bora, Yagua, Ocaina, Murui, Secoya y Ticuna, y protegen las cabeceras de cuenca de los ríos, cuya conservación ha sido declarada de interés público regional, según una Ordenanza Regional de Loreto.
Asimismo, más del 60% de esta vía pasaría por las ACR y territorios indígenas, pudiendo ocasionar la pérdida de alrededor de 428.718 hectáreas de bosque. Esto afectaría la conectividad y el intercambio genético en plantas y animales silvestres, poniendo en peligro la alimentación de los pueblos indígenas y contaminando las cabeceras de cuenca.
La carretera tendría un impacto ambiental negativo para los pueblos indígenas. Foto: difusión
De acuerdo a las poblaciones indígenas afectadas, el Ministerio de Transportes no habría realizado una consulta previa para ejecutar la carretera Bellavista-Mazán-Salvador-El Estrecho.
Ante ello, las comunidades han conformado un frente integrado por organizaciones Indígenas de los territorios del Putumayo, Napo y Bajo Amazonas para exigir una consulta previa y ser incorporados en los procesos de diálogo que implica este proyecto que se extendería unos 188 kilómetros, en medio de cuestionamientos diversos.
Por otra parte, el conflicto ha escalado al punto que representantes de la Organización Regional de los Pueblos Indigenas del Oriente (Orpio) vinieron a la capital peruana para exigir que el MTC inicie la consulta previa correspondiente.
La carretera que unirá Perú y Colombia tendrá una inversión de más de S/1.546 millones. Foto: difusión
La coordinadora de la Oficina Descentralizada de Loreto de Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR), Cristina López Wong, se mostró preocupada por el impacto ambiental que tendría la carretera Bellavista-Mazán-Salvador-El Estrecho.
Ella aseguró que en diciembre de 2014, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) advirtió que este proyecto vial no es compatible con la naturaleza jurídica y condición natural del Áreas de Conservación Regional (ACR) Ampiyacu Apayacu.
Asimismo, indicó que el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) planteó que los siguientes tramos (II, III y IV) de la carretera que unirá Perú con Colombia incluyan una evaluación de impactos acumulativos, aquellos que individualmente, viéndolos por cada tramo separado, pueden pasar desapercibidos, pero juntos pueden ser significativos.