En San Juan de Lurigancho, vecinos denunciaron que son perjudicados por una pollería construida en un local que fue alquilado como vivienda. “El olor a grasa se impregna”, dijo uno de los residentes del edificio del costado a "ATV noticias", quien manifestó que se ven obligados a mantener cerradas las ventanas pese al calor porque el humo, proveniente de las chimeneas del establecimiento, y el aroma a pollo a la brasa es muy fuerte.
En el edificio perjudicado viven tres familias y son alrededor de 14 personas quienes vienen presentando sus quejas hacia la Municipalidad de San Juan de Lurigancho en reiteradas ocasiones, sin realizarse ningún cambio ante el problema. “Ha ido a la municipalidad a presentar documento, los multaron, pero siguen igual”, expresó un residente al medio televisivo. “El dueño del negocio dice que no tiene nada que ver, que hable con el propietario. Le pido el teléfono y nunca me lo dan”, agregó.