El asesinato de la dirigente del pueblo joven de El Porvenir en Yura, Ada Apaza (54), conmocionó a la Ciudad Blanca. La hija de la víctima, Claudia Hidalgo, pidió a la Policía que capture a los delincuentes que torturaron hasta causarle la muerte a su madre para robarle más de medio millón de soles. El dinero sería de sus ahorros y dinero que una de sus hijas le enviaba desde España.
Claudia manifestó a La República que, horas antes del asesinato, su madre había asistido a una capacitación en el local social de El Porvenir que era organizado por la empresa de Cementos Yura. Asimismo, sospecha que cuando la víctima retornó a su casa, sorprendió al invitado de su inquilina con un sujeto más, quien sustraía su dinero guardado.
El crimen ocurrió el lunes 21 de noviembre, minutos antes de las 5.00 p. m., en la vivienda de la comerciante ubicada en el pueblo tradicional de Yura. “El hecho fue presenciado por los hijos de la inquilina, quienes culparon a su tío y amigo de este último, por atacar a mi madre”, narró la hija de la víctima.
Según los familiares, Ada Apaza alquilaba desde hace tres meses una habitación de su domicilio a una familia que era natural de Azángaro de la región de Puno. “Por la declaración de los niños, creemos que fue el conviviente de la mujer quien mató con otra persona más a mi madre. Ellos tenían planificado robar los ahorros, ya que no se llevaron otros bienes”, señaló.
Es preciso mencionar que la madre de ambos niños, Lucrecia Quispe (38), fue intervenida por la Policía y su testimonio es clave para ubicar a los principales sospechosos del crimen.
“Pido a las autoridades que nos brinden su apoyo. Que se haga justicia por mi madre, ella no merecía morir de esa forma”, finalizó Claudia.
Según la Policía, la mujer fue torturada debido a que presentaba múltiples fracturas en el rostro y costillas. Asimismo, la necropsia de ley arrojó que murió a causa de una aspiración de sangre.
Si has sido o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).