En el Rímac, agentes de la Policía Nacional hallaron el cuerpo sin vida de la ciudadana Olinda Silva Díaz, de 73 años de edad, a quien sus familiares habían reportado como desaparecida cuatro días atrás luego de perder comunicación con ella.
La mujer fue encontrada maniatada en el interior de la vivienda que alquilaba en la primera cuadra de la avenida Próceres. Junto con sus restos, permanecía su hija, quien tiene autismo.
“Mi tía tiene dos propiedades, hace unos días iba a hacer remodelaciones en una de ellas, por lo que contactó a un señor de nombre Hugo, quien a su vez le recomendó a dos trabajadores de nacionalidad extranjera, en el transcurso de esos días perdimos comunicación”, sostuvo la sobrina de la víctima, Rosa Flores, en diálogo con La República.
Olinda Silva, quién se dedicó durante años al rubro de la educación, guardaba parte de sus ahorros y joyas en el interior de su domicilio. Sus seres queridos denunciaron que no se encontraron sus pertenencias, lo que los hace sospechar que fue asesinada y asaltada.
“La han encontrado maniatada, boca abajo y las manos atadas, después de hacer este acto salvaje le pusieron candado a la puerta. El móvil para nosotros ha sido el robo”, refirió Flores.
El caso está a cargo de la VI Fiscalía corporativa, donde ya se iniciaron las investigaciones. El círculo más cercano de la mujer de la tercera edad exige justicia para dar con el paradero de los responsables.
“Mi tía es una mujer que no merecía ese final, su muerte nos ha causado una gran pena en todos nosotros, es por eso que exigimos a las autoridades acelerar las investigaciones”, solicitó la sobrina de la víctima.