La madrugada del último domingo, Julio César Sánchez Cantos (25), natural del distrito de Picsi, provincia de Chiclayo, región Lambayeque, fue asesinado por sicarios de 10 disparos con un arma de guerra. El hombre se encontraba en el interior del automóvil con placa T6G-229, estacionado en el asentamiento humano Esperanza Baja, en el distrito de Chimbote, en Áncash.
Según los medios locales, Sánchez Cantos estaba acompañado de una mujer en el vehículo cuando dos sujetos llegaron a bordo de una motocicleta y abrieron fuego contra la unidad sin mediar palabra. Los balazos traspasaron el parabrisas y ventanas, e impactaron en el cuerpo del conductor. Alertados del hecho, los vecinos dieron aviso a la Policía.
Peritos de Criminalística de Chimbote hallaron en la escena 10 casquillos de balas de nueve milímetros (arma de guerra). El cuerpo sin vida permaneció por varias horas en el interior del auto hasta el arribo de la fiscal Mónica Machay Villanueva, quien autorizó el traslado del cadáver a la morgue de Chimbote para continuar con las diligencias.
En conversación con los agentes policiales, la acompañante de la víctima indicó que él había sido citado por unos sujetos hasta ese lugar, los mismos que habrían planeado el asesinato. En tanto, al fallecido se le sindicaba de ser el presunto líder de la banda criminal Los Nenes de Casma.