Cuestionamientos continúan. Aunque el Ejecutivo dispuso el retiro de Mario Carhuapoma como presidente ejecutivo de EsSalud en enero, ello no le impidió a este solicitar al Seguro Social la asignación de un vehículo, chofer y combustible a fin de instalar su “oficina” como miembro del Consejo Directivo de dicha institución.
Así lo reveló el dominical Panorama, programa que presentó la carta enviada por Mario Carhuapoma el 19 de enero pasado a Gino Dávila Herrera, actual presidente ejecutivo de EsSalud, para que disponga “gestionar” su “requerimiento necesario en la implementación de la oficina”.
En dicho documento, Carhuapoma también solicita una secretaria, asistente administrativo y que dicha oficina se halle equipada con impresoras, anexos, equipos de cómputo y conexión a internet; requerimientos habituales, no como los primeros.
Vale precisar que el también químico farmacéutico fue retirado de la presidencia de EsSalud a mediados de enero, luego de que se conocieran denuncias en su contra por presuntas contrataciones irregulares en el Seguro Social y otras acusaciones de violencia contra la mujer.
La denuncia por violencia familiar fue consignada el 15 de junio del 2016 por su esposa. En dicha ocasión, los agentes de la Policía indicaron que el funcionario presentaba síntomas de haber ingerido bebidas alcohólicas, de acuerdo al atestado.
Sin embargo, Carhuapoma aún se mantiene en la alta dirección, puesto que el 13 de enero fue nombrado como vicepresidente del Consejo Directivo de EsSalud, por lo que, incluso, tendrá la facultad de reemplazar a Gino Dávila en el ejercicio de sus funciones en casos excepcionales que impidan el desempeño del alto funcionario mencionado.