Solsiret Rodríguez desapareció en agosto del 2016 y cuatro años después solo hallaron el 30% de sus restos enterrados en la casa de su excuñada Andrea Aguirre, a quien acusan de haberla asesinado junto con Brian Villanueva, el hermano de su expareja y padre de sus hijos.
Después de más de cinco años de lucha y espera, la familia de la activista podría vislumbrar el inicio del proceso de justicia, puesto que este miércoles 17 de febrero se dio inicio a la audiencia de la acusación fiscal.
El fiscal del caso, Jimmy Mansilla, ha encontrado 83 elementos de prueba y ha formulado la acusación donde solicita 15 años por homicidio calificado contra Andrea Aguirre y Kevin Villanueva. Además, siete años por encubrimiento real agravado contra Bryan Villanueva y Yolanda Castillo, esta última es madre de la expareja de Solsiret y de uno de los presuntos asesinos.
Demus hizo un llamado a la Corte del Callao para no ignorar las características de feminicidio que tiene el caso, ya que el fiscal mencionado también solicitó, como delito alternativo, 30 años de prisión por feminicidio.
De acuerdo al medio de comunicación Wayka, para el fiscal Mansilla, Solsiret Rodríguez fue víctima de feminicidio porque antes del crimen, la activista feminista sufrió constantes acosos y tocamientos indebidos por parte de su cuñado Kevin Villanueva. Además, Andrea Aguirre cometió feminicidio contra Solsiret luego de que se enterara que había mantenido una relación con su enamorado Kevin Villanueva.
La Fiscalía argumenta que la acusada generó un odio hacia la víctima, y ese odio y desprecio la llevaron a asesinarla hasta desaparecer la mayor parte de su cuerpo y conservar una parte como si se tratara de un trofeo. “Lo que denota de dicho contexto es la aversión hacia Solsiret como mujer, quien no se ajustaba a los estereotipos de género de mujer fiel”.
El juez Roberto Sucno Jara, del 4to Juzgado de Investigación Preparatoria, decidirá qué tipo penal se acepta.
En caso no haya observaciones en la acusación fiscal, se programará la fecha para el inicio del juicio oral.
Si ha sido o conoce a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, puede comunicarse de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente.