Puno: sujeto confesó su participación en el asesinato de su esposa
Luego de ser capturado por rondas campesinas, Richard García detalló que participó en el plan del asesinato de su pareja. Otras dos personas están prófugas.
Richard García Chislla contó públicamente por qué estuvo detrás del crimen de su esposa R. M. C. (33), quien se hallaba desaparecida desde el 9 de enero. Tuvieron que pasar nueve días para se descubriera la verdad en el distrito de Macusani, provincia de Carabaya, región Puno.
Las rondas campesinas lo detuvieron el sábado en la tarde. Tras caer en contradicciones, aceptó que era uno de los responsables del crimen. Los comuneros tenían indicios de que Agustina Sucapuca Mamani, presunta amante de García, tenía algo que ver, por lo que también fue aprehendida.
Ambos fueron paseados por la Plaza de Armas de Macusani. Los exhibieron por presión de los familiares que exigían justicia. García confesó ante todos que participó del crimen de su esposa porque quería empezar una nueva relación con Sucapuca.
Sin embargo, no aceptó ser el asesino material. Alegó que otras dos personas, actualmente prófugas, participaron en el crimen. Para que la coartada parezca perfecta simularon un robo.
Agustina Sucapuca también habló. Reveló que, el lunes 10 de enero, Richard García le informó de un supuesto asalto, “pero después terminó confesándome que con unos amigos había planificado el asesinato de su esposa. Los ejecutores serían amigos del hombre”, dijo.
Las rondas campesinas aceptaron en parte la versión de la mujer y advirtieron que está implicada en la desaparición del cuerpo de la víctima. Evaluarán si los entregan al Ministerio Público y a la Policía, o los someten al castigo comunal.
Canales de ayuda
Si usted ha sido o conoce a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, puede comunicarse de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).
