La Reserva de la Biósfera del Manu, ubicada entre las regiones de Cusco y Madre de Dios, es una de las áreas protegidas más extensas del país por la variedad de pisos altitudinales y biodiversidad de flora y fauna. Precisamente, el Parque Nacional del Manu (reconocido como Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco), se ha convertido en un gran atractivo para el turismo ecológico y científico.
Dentro de ese contexto, la Reserva promueve el desarrollo sostenible de las poblaciones locales, la diversidad cultural, la investigación y educación para impulsar el crecimiento económico en las comunidades que la conforman, haciéndolas reconocidas por sus productos y emprendimientos. Todo esto dentro de un modelo de gestión.
Los visitantes al ingresar a la Reserva de Biósfera del Manu encuentran un espacio natural altamente conservado con varios ecosistemas y culturas diferentes. En su recorrido, pueden observar el caimán negro, el águila arpía y una gran diversidad de aves. También pueden realizar actividades de aventura como trekking, ciclismo, canotaje y maratón; así como visitar comunidades nativas y practicar turismo místico y científico.
El 2019, de acuerdo a las cifras de la Reserva de Biósfera del Manu, recibió a 20.000 visitantes, en su mayoría en su mayoría provenientes de países como Estados Unidos, Alemania, Inglaterra, España, Holanda, Canadá y Chile. Durante el 2020 e inicios del 2021, no se recibió visitantes, pero a partir del segundo semestre de este año empezaron a llegar turistas nacionales.
“Para el 2022 esperamos que la cifra de visitantes a la Reserva de Biósfera del Manu, el Parque Nacional del Manu y a la zona de amortiguamiento rodee los 10.000″, indicó Tula Barazorda Chipa, presidenta del Comité Distrital Kosñipata de la Reserva de Biósfera Manu, quien además sostuvo que trabajan con las empresas turísticas para que presten sus servicios alineados con los criterios de sostenibilidad.
Las comunidades reconocen que la Reserva es una oportunidad para mejorar el crecimiento económico a través de los alimentos que produce, entre los cuales destacan el café, ajíes, plátano, piña, papaya y una variedad de plantas medicinales.
“El primer producto que ya dio el paso es el aguaymanto, fruto que proviene de las comunidades altoandinas de la Reserva de Biósfera del Manu y que se encuentra en los mercados locales y regionales, próximamente se estará insertando en los mercados nacionales”, añadió Américo Hurtado, presidente del Comité de Gestión del Parque Nacional del Manu.
De acuerdo con un estudio de Insight Hunting SEO, se pudo conocer que las búsquedas online sobre reservas naturales en el Perú en países de habla hispana en promedio fueron de 1.677 búsquedas mensuales durante el 2021, mientras que en los países de habla inglesa fueron de 300 y 450. Entre los países que más realizan estas búsquedas online se encuentran Argentina, Chile, España, EE. UU., Inglaterra y Canadá.
La Reserva de Biósfera del Manu recibe el apoyo de múltiples instituciones entre las que destacan los Gobiernos regionales de Cusco y Madre de Dios, Sernanp, Municipios Distritales de Fitzcarrald, Manu, Challabamba, Kosñipata y Yanatile. Además, cuenta con el acompañamiento y asesoría de la Cooperación Alemana para el Desarrollo (GIZ), implementada por la Sociedad Zoológica de Fráncfort (FZS Perú), dentro del marco del programa ProAmbiente.
La Reserva de Biósfera del Manu está conformada por más de 50.000 personas, entre comunidades campesinas e indígenas, poblaciones colonas, pueblos originarios y poblaciones en contacto inicial y aislamiento. Para mayor información sobre la Reserva de Biósfera del Manu y el Parque Nacional del Manu puede ingresar aquí.