Wilder Pari - Liubomir Fernández
Los sismos ocurridos el fin de semana en Arequipa y Puno, causaron daños en viviendas y temor en la población.
En Arequipa, por ejemplo, de acuerdo a los primeros reportes del Centro de Operaciones de Emergencia Regional (Coer), se indica que la cadena de sismos del viernes y sábado en el valle del Colca (Caylloma), dejó 85 viviendas afectadas y 15 inhabitables.
El reporte del Coer señala que del total de viviendas afectadas, 33 se ubican en Cabanaconde y 52 en Pinchollo. Esta última localidad fue epicentro del movimiento de 5.5 grados de magnitud del viernes.
Mientras que las 15 viviendas inhabitables, según el Coer, se ubican en el distrito de Madrigal. En el lugar también hubo un derrumbe en la zona arqueológica.
Otras afectaciones reportadas al momento, es de una casa afectada en el distrito de Achoma, además en Coporaque se presentan filtraciones en el canal principal y fisuras en algunas viviendas.
El consolidado final tendría más viviendas afectadas. Hace unas horas, el alcalde de Tapay, Gusman Huacallo, informó que habría 50 casas con fisuras, aunque todavía no figura en el reporte del Coer.
Según el director del Instituto Geofísico del Perú (IGP) Hernando Tavera, la cadena de sismos en el Valle del Colca del viernes y sábado, fue originada por la falla El Trigal, que se ubica frente a Huambo, Cabanaconde y Pinchollo.
Mientras que el sismo de magnitud 5.4, reportado la noche del sábado en Pillcopata, Cusco, también se sintió en Puno.
Según el Centro de Operaciones de Emergencia del Gobierno Regional de Puno (COER), el movimiento fue percibido en diez distritos del altiplano (Macusani, Ayapata, Coasa, San Gabán, Ituata, Ollachea, Crucero y Corani de la provincia de Carabaya y en San Juan del Oro, Sandia, San Pedro de Putina Punco y Yanahuaya de la provincia de Sandia).
El sismo causó temor en el asentamiento minero Mucumayo (Carabaya). Allí los mineros que trabajan en socavones abandonaron sus operaciones ante el temor de ser atrapados por deslizamientos de tierra.