Tras los casos de las denominadas ‘vacunas de aire’, Susalud inició la supervisión de los centros vacunatorios. En San Martín de Porres, se encargó de observar si se cumple con el protocolo de inmunización, que implica mostrar la jeringa al paciente.
“Se les explica a los acompañantes que vienen que el llenado es del paciente, no del acompañante. Pero, aun así, siempre hay estas pequeñas cosas. Los buscamos por el SIS o EsSalud”, explicó una enfermera a Canal N.
Asimismo, Susalud verificó que el personal de salud detalle a cada persona sobre qué vacuna se les pone, si las jeringas están llenas y el tamaño de la muestra. Sin embargo, durante ese proceso, la entidad encontró irregularidades, pero no por parte del personal médico, sino por las personas que “omiten poner datos o firman doble (en documentos) en los que aceptan primero ser vacunados y luego figura como que no”.
“Antes de que pueda ser evaluado, el médico realiza el filtro y le indica al personal de salud para que vuelva a llevar a cabo la documentación”, expresó.