El laboratorio científico estadounidense Merck Global emitió un pronunciamiento para dejar sentada su posición sobre el uso del Stromectol, nombre con el cual comercializa la ivermectina en Estados Unidos, en personas infectadas con el nuevo coronavirus.
“Los científicos de la compañía continúan examinando los descubrimientos de todos los estudios disponibles y emergentes de la ivermectina para el tratamiento de la COVID-19″, detalla el comunicado publicado el jueves 4 de febrero.
A la fecha, las investigaciones a cargo de Merck han identificado tres conclusiones que el texto resalta:
El laboratorio también precisa que no creen que los datos disponibles hasta el momento respalden la seguridad y la eficacia de la ivermectina.
Merck recalcó tres puntos sobre el fármaco antiparasitario. Foto: captura web
El Stromectol es un antiparasitario comercializado en EE. UU. para el tratamiento de la estrongiloidiasis intestinal y oncocercosis. “El Stromectol no tiene ninguna actividad contra los parásitos del onchocerca volvulus”, aclara también el laboratorio en su comunicado.
Pese a que los estudios sobre la ivermectina aún no son concluyentes, en Perú sigue siendo incluido en los kits de tratamiento ambulatorio en los centro de salud del primer nivel de atención.
Según la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, “no hay todavía evidencia suficiente a nivel mundial” sobre la efectividad del cuestionado fármaco.
Sin embargo, la Resolución Ministerial 375-2020 sostiene que queda a criterio del médico recetar ivermectina según sea el caso. En tanto, el memorando de EsSalud advierte que solo será entregada a pacientes con comorbolidades y que sean mayores de 65 años.
En lo que por ahora están de acuerdo médicos y demás personal de salud, es que la ivermectina no previene la COVID-19 y no debería usarse como tal. Un dato brindado por el doctor Edward Mezones, del Hospital de Sullana, señala que el 65% de pacientes fallecidos por el virus la habían consumido.