Aparecen los primeros voluntarios para probar vacuna contra la COVID-19 en el Perú [VIDEO]
Mientras que los resultados positivos de la vacuna de Oxford mantienen en vilo a la población, el Perú no se queda atrás y se suma a la carrera científica para detener el avance del coronavirus.
Desde abogados hasta consultores en temas ambientales son los candidatos que se han puesto a disposición de las autoridades de salud del Perú para permitir que en ellos se pruebe una de las vacunas que podría contrarrestar a la COVID-19.
Según la exministra de Salud, Patricia García, los voluntarios firman un documento de carácter ético denominado ’consentimiento informado’ en el que se les indica los pro y contras que pueda generar la vacuna. Además, estarán e sometidos a un constante monitoreo con la finalidad de evaluar la reacción de la misma en sus organismos.
“El voluntario da su consentimiento informado, así se llama, es un proceso ético en el que está establecido la participación de los humanos en la investigación. Los voluntarios tienen que saber a qué se atienen. Reitero, no es un contrato, sino que más bien le aclara qué es lo que se está esperando, cuáles son los efectos adversos y los posibles beneficios”, señaló para Cuarto Poder.
En esa línea, el medio local logró contactar a algunos de los voluntarios, quienes manifestaron estar totalmente de acuerdo con participar en el proyecto de investigación, pues es una forma de ‘hacer patria’ y de poder ayudar a encontrar la vacuna contra el coronavirus.
Norma Marín, abogada de profesión y madre de familia, señaló que ella se suma a esta investigación porque sabe que es una forma de poder darle seguridad a sus hijos para que se apliquen la vacuna; además, del aporte que dará al país.
“Mi principal motivación es que darles la seguridad a mis hijos, que ellos tengan la certeza de que alguien tan cercano a ellos ha probado esta vacuna y todo ha ido bien, que no hay ningún riesgo ni nada que temer. Por otro lado, el aporte significativo que le vamos a dar a nuestro país”, dijo.
También se encuentra la esteticista Olenka Rivera, quien argumentó no tener temor de someterse a la investigación, pues todas las vacunas que ya se han aplicado antes llevan en menor cantidad el virus al que se necesita atacar y no ha pasado nada malo. Razones que la hacen sentir segura para enfrentar a la COVID-19.
De la misma manera, David Lescano, consultor ambiental, se encuentra entre los voluntarios. Él reveló que en su círculo social muchas amistades estarían dispuestas a someterse en el experimento dado que algunos de ellos han sobrevivido a la enfermedad y han visto de cerca la realidad del país frente al mortal virus.
Finalmente, Patricia García señaló que es muy importante tener personas que se quieran someter a las investigaciones que durarían entre 3 a 6 meses.
“Necesitamos voluntarios de todas las edades, mayores de edad, porque necesitamos saber cómo va a funcionar la vacuna en varias personas”, dijo García.
