Para que el transporte público retorne en algunas ciudades, los transportistas urbanos han tenido que adecuar sus unidades a los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud para evitar el contagio de la COVID-19. Esto ha significado una inversión extra para los transportistas.
Para subvencionar este gasto, el último jueves por la noche, el Ejecutivo publicó el Decreto de Urgencia Nº 079-2020 que “(…) otorga subsidio económico a los prestadores del servicio de transporte terrestre regular de personas de ámbito provincial”.
El apoyo económico fue destinado para 26 municipios provinciales de 21 regiones del país donde figuran Puno, Cusco. Tacna, Moquegua y Apurímac. Este subsidio será distribuido a los transportistas, mediante sus autoridades provinciales, en combustible o dinero.
En el caso de Puno, las municipalidades provinciales beneficiadas son Puno y San Román (Juliaca); en Apurímac, la provincia de Abancay; en Moquegua, la provincia de Mariscal Nieto y las municipalidades provinciales de Cusco y Tacna, respectivamente.
Con el subsidio, se esperaba que los choferes en estas ciudades no incrementen la tarifa por pasaje urbano.
En los últimos días, el pasaje urbano en Cusco subió de S/ 0.80 a S/ 2.00 a causa de la pandemia, y por el funcionamiento de los buses con un aforo del 50%.
La Asociación de Servicio de Transporte Urbano aprobó no rebajar el precio, pese a que hubo reclamos de varios sectores de la ciudadanía.
Son 36 empresas, con más de 1500 unidades vehiculares, las que tienen la concesión del servicio urbano en la Ciudad Imperial.
En Puno, los usuarios también reportaron que ahora las combis les cobran S/ 1.50, cuando antes el pasaje era S/ 0.60. Lo mismo ocurre en Juliaca.