La Policía detuvo a 20 padres de familia del colegio San Martín de Porres que realizaban una protesta para exigir que dicho centro educativo particular reduzca las pensiones de sus hijos en un 50 %. En el estado de emergencia sanitaria actual que enfrenta el país a causa del COVID-19 hizo que se prohíban todo tipo de reuniones sociales, por lo que los efectivos del orden dispersaron a los manifestantes.
Lamentablemente se registraron incidentes en los que se utilizó la fuerza. El altercado habría iniciado luego que uno de los padres de familia se quitó la mascarilla que es de uso obligatorio en las vía pública. El objetivo de esta persona era arengar sus protestas para que sus compañeros lo siguieran por lo que los efectivos del orden tuvieron que detenerlo, pero él se resistió y cayó al piso en medio de los reclamos que hacían los padres.
Los manifestantes calificaron estos actos como un abuso de parte de la Policía y dijeron que su intención no era romper el estado de emergencia, sino reclamar por los excesivos costos que el colegio religioso les exige pagar. Según los padres de familia la mensualidad era de 320 soles y se les hizo una rebaja de apenas 70 soles.
Por su parte la comisario del Cusco, comandante PNP Edith Espejo, negó que se haya utilizado la fuerza indebidamente en este caso. La integrante de la Policía Nacional dijo que se hicieron respetar las normas vigentes y que si alguien tiene denuncias o reclamos que hacer estas deben presentarse ante las instancias respectivas, sin atentar contra la salud pública.
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“Se les ha instado inicialmente a que se retiren y se siguen concentrando, están prohibidos los plantones. No se puede permitir que irresponsablemente las personas se quiten los barbijos para arengar”, precisó la comandante Espejo.