El implacable azote del coronavirus a la economía mundial ha forzado a muchas empresas a cambiar de rubro para salir a flote ante la crisis.
Es el caso de la compañía Alida S.A, gerentada por Gino Pietroni, quien halló un chance de negocio en la fabricación de féretros en épocas de coronavirus.
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Desde hace medio siglo, su empresa produjo puertas para el sector inmobiliario, pero ahora estará enfocada en la elaboración de ataúdes especiales para cremaciones. “Lo que veo en las noticias de acá y en otros países es que muchos cuerpos están arrimados o guardados en cajas de cartón”, comenta Pietroni sobre Alida S.A. a Amércia Noticias.
“Es algo inhumano. Decidimos desarrollar un producto que permita que el cuerpo entre directamente a las cámaras de cremación con ataúd, y de manera simultánea”, agrega el empresario. Además, asegura que los diseños de los ataúdes son hechos con equipamiento de alta tecnología y son elaborados según las exigencias de los clientes.
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“Hicimos algunas donaciones y el producto gustó. Hoy estamos trabajando con empresas importantes. Con estos féretros especiales, el personal del crematorio es protegido y se evita la manipulación del cadáver”, puntualiza Pietroni, quien sentencia que el cuerpo entra el féretro embalsamado en una bolsa sellada, luego ingresa al cajón para ir directo a la cámara de cremación.