La funeraria Piedrangel reconoció que hubo un error en la entrega de los restos de una persona fallecida con COVID-19.
Esto salió a relucir luego de que una familia denunciara que los restos de su padre fueron entregados en dos urnas diferentes y en horas distintas.
Sin embargo, Miguel Gonzales, administrador de la empresa, manifestó que las cenizas del fallecido sí pertenecen a la misma persona, solo que hubo un error de comunicación entre su personal, pues para este tipo de casos las cenizas van en dos urnas debido a la cantidad.
“En el mercado las urnas tienen una medida estándar. Para casos especiales como estos sobrepasan la cantidad y se requieren dos. En estos momentos no hay un stock para hacer urnas más grandes y más prácticas”, declaró para 24 Horas.
Asimismo, comunicó que su crematorio es contratado por entidades de salud, debido a que su logística es respaldada por los protocolos sanitarios establecidos para casos COVID-19.
“Las entidades que nos contratan son entidades de salud del estado, nosotros podríamos entregarles las cenizas a ellos mismos, pero sabemos que los médicos y todo el personal sanitario están ocupados, por eso con nuestros propios mecanismos preferimos llevarlas a las mismas familias”, señaló Gonzales.
No obstante, en El Agustino otra familia se sumó al reclamo, pues la madre de uno de ellos falleció con coronavirus el 19 de abril y hubo una demora en la entrega de las cenizas.
“Nosotros tenemos que cremar cuerpo por cuerpo y eso demanda también bastante tiempo y horas de trabajo”, indicó el administrador de la funeraria.