Grover Lozada
La facultad de Ingeniería de la Universidad de Piura (UDEP) reparó tres respiradores que se encontraban aparentemente abandonados en los hospitales Cayetano Heredia y Santa Rosa. Dos equipos del primer establecimiento fueron reparados en la misma sede, mientras que el otro se tuvo que llevar a la mencionada universidad para ser arreglado.
Asimismo, la UDEP espera reparar diez equipos más en los próximos días. El siguiente paso sería fabricar más respiradores con los materiales que adquiera del Gobierno Regional de Piura.
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“Después de analizar los equipos, vimos que son susceptibles de reparación. Hay algunos sensores que no son fáciles de conseguir, pero vamos a fabricar unos componentes alternativos con el uso de impresoras 3D”, comentó el decano de dicha facultad, Jorge Machacuay.
Actualmente trabajan en el acondicionamiento de dos equipos que estarán listos para el fin de semana. Además, están siendo acondicionados para que un solo equipo pueda ser utilizado por dos personas en forma simultánea, como se viene haciendo en otros países.
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El decano indicó que según las autoridades de Salud, habría hasta doce respiradores en la región que están dañados. “Queremos que los traigan a la universidad para analizarlos y ver si es factible su reparación”, señaló.
Estos equipos estarían en diversos centros médicos, como los hospitales Jorge Reátegui y Santa Rosa, entre otros, donde se les ha dado de baja, pero podrían ser recuperados. También señaló que se acondicionarán los cinco respiradores que actualmente funcionan en la región, para duplicar su capacidad.
Nuevos equipos
Si bien la iniciativa planteada por el rector de la UDEP, Antonio Abruña, fue la posibilidad de fabricar nuevos respiradores, la ejecución de esta se encuentra en espera debido a la falta de insumos necesarios para su fabricación.
“Recibimos el encargo de nuestro rector de ver la posibilidad de elaborar unos respiradores artificiales, porque había llegado un pedido del gobierno regional. Dijimos que sí; sin embargo, el problema es la logística. Hay componentes que no podemos conseguir aquí; y fabricar elementos alternativos tomaría mucho más tiempo. Si el gobierno puede acelerar esos procesos, no tenemos problema para fabricarlos”, aseguró Machacuay.