La Asociación de Padres de Niños con Insuficiencia Renal (APNIR) denunció que niños y mayores de edad con insuficiencia renal vienen siendo mal atendidos en las clínicas particulares a las que fueron derivados por el Hospital Nacional Cayetano Heredia por orden de médicos de este nosocomio.
La falta de insumos para realizarles la hemodiálisis y otros tratamientos fue la razón por la que tuvieron que acudir a otros centros de salud, según el Fondo Intangible Solidario de Salud (FISSAL).
Estas clínicas no cuentan con los cuidados que necesitan los pacientes ni con un nefrólogo pediátrico, según los denunciantes, quienes son 11 menores de edad y 22 adultos. “Mi hija está en un ambiente precario y no hay insumos completos. Ella tiene catéter pediátrico, la derivan al hospital para que los especialistas le cambien, se puede infectar y ocasionarle la muerte, solo hay un médico, por tal motivo, su pequeña ingresó de emergencia”, cuenta Jhon Salvatierra, padre de una paciente.
Mavi Cahuasa también sufrió los efectos de esta medida, pues, tras ser dializada, tuvieron que internarla en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Ella desmintió al FISSAL; afirmó que el hospital sí cuenta con las máquinas necesarias.
Alejandro Almestar, de 26 años, acusó al personal del centro de salud donde se atiende porque carece de experiencia. Dijo que le causan dolor cuando le dan los medicamentos y que las camillas no son adecuadas.
“Tengo insuficiencia renal crónica terminal y también hiperoxaluria, me dializo desde el 2010. Soy de Piura, me mudé a Lima para tratarme, y es tedioso movilizarme con dolor de un distrito a otro”, contó Cristian Manchay, quien, pese a que tiene 21 años, está incluido en el programa de niños.
El abogado de los pacientes y director de Derecho y Justicia en Salud, Mario Ríos, aclara que es una política tercerizar este tipo de atenciones a entidades particulares; sin embargo, no toman en cuenta las condiciones adecuadas para los enfermos.
“El Hospital Cayetano Heredia cuenta con todos los especialistas, cardiólogo, infectólogo, nefrólogo pediátrico, entre otros. Por tanto, no es necesario depender de otras entidades”, explicó.
Los padres de los pacientes perjudicados protestarán frente al Ministerio de Salud este lunes 7 de octubre desde las 6:30 de la mañana. Exigen que la ministra de Salud, Zulema Tomás, que se garantice el servicio de hemodiálisis.
Respecto a esta denuncia, Roxana Chaud Cobarrubias, nefróloga del Fissal, en comunicación con La República, negó que se haya desantendido a los pacientes que necesitan las diálisis y que por el contrario, se les brindado todas las facilidades para que puedan seguir con su tratamiento en otros establecimientos médicos.
Explicó que el convenio que se venció el 27 de setiembre era con la Universidad Cayetano Heredia, y no con el hospital del mismo nombre.
Debido al cese de dicho convenio se ofreció a los asegurados ser derivados a cualquiera de las 63 clínicas a nivel nacional con las que el Fissal tiene convenio y que cuentan con áreas de hemodiálisis.
Indicó que en el caso de los adultos, fueron trasladados a los nuevos centros donde han seguido siendo dializados y que hasta el momento no han recibido quejas en cuanto a temas de atención.
En el caso de los menores de edad, se ofreció derivarlos al Hospital del Niño, pero los padres no quisieron y solicitaron que sus hijos sigan siendo tratados en el Cayetano Heredia.
Chaud Cobarrubias asegura que el Fissal no ha podido transferir los fondos destinados al hospital Cayetano para el tratamiento de los menores, porque justamente el hospital no cuenta con la acreditación de su unidad de hemodiálisis.
Explicó que desde que se venció el convenio con la universidad, los niños han seguido siendo dializados en el hospital Cayetano, y que las gestiones para que se lleven a cabo las sesiones las ha hecho la dirección nosocomio.
Una versión que confirmó la directora del Hospital Cayetano Heredia, doctora Aida Palacios, quien también negó que se esté dejando de atender a los pacientes asegurados que requieren la diálisis.
Sostuvo que los diez menores están siendo tratados en el servicio de hemodiálisis del hospital, el cual sí está debidamente acreditado por el Ministerio de Salud.
Aseguran que las diálisis crónicas, que son las requeridas por los niños, se seguirán realizando con los costos que asume el propio Minsa.
El día de mañana la doctora Palacios sostendrá una reunión con autoridades del Fissal y el Minsa.