Sociedad

Alzhéimer: la lucha de Emilia contra el olvido y la soledad

Un mal silencioso. Enfermedad se manifiesta en algunas personas mayores de 65 años. La familia es el gran soporte.

Alzheimer
Alzheimer

Por: Ángela Valdivia

Emilia fue diagnosticada en el 2012 y desde entonces su esposo no la deja sola. El viaje es largo y Carlos sabe que lo único que puede hacer por ella es acompañarla. El pasado 21 de setiembre se conmemoró el Día Mundial del Alzhéimer, un día de reflexión para Carlos y para muchas familias que pasan por este drama (200 mil según el Minsa).

Emilia tuvo episodios de desorientación y olvido un año antes de ser llevada al médico. No fue un momento, sino la suma de casi 12 meses de situaciones extrañas, lo que motivó a Carlos Vera Tudela a buscar ayuda sin pensar el diagnóstico que le darían: alzhéimer, un tipo de demencia que con frecuencia se presenta en personas mayores a 65 años.

Era finales del 2012 y Emilia Traverso tenía 71 años.

Carlos cree que la enfermedad se presentó a raíz de dos factores: un cuadro depresivo debido a la pérdida de su hija y una isquemia cerebral. Ambas cosas ocurrieron dos años antes del diagnóstico.

El neurólogo Nilton Custodio, director del Instituto Peruano de Neurociencias (IPN), señala que con el alzhéimer el cerebro se acumula de amiloides y que este mal también puede tener un factor hereditario.

Las dificultades

Llegar al diagnóstico preciso no siempre es sencillo. Ese fue el caso de Emilia. Pasaron meses en los cuales le realizaron diversas pruebas psicológicas e incluso una resonancia magnética para saber qué tenía. Una vez que se descubrió su mal, los tratamientos y medicamentos variaron hasta que encontraron los adecuados. Algunos son brindados por EsSalud y de los otros se hace cargo Carlos.

La psiquiatra Mariela Guerra, vicepresidenta de la Asociación Peruana de Alzhéimer (APEAD), explica que la medicina no es el único gasto que deben cubrir las familias, pues mientras este tipo de demencia avanza se requiere de alguien que se haga cargo de la persona. "Tienes que pagar a un cuidador o tú tienes que dejar de trabajar para cuidarla", indica.

Así sucede con Carlos y Emilia. Él requiere de la ayuda de otra persona para acompañar a su esposa. "Ya no se puede desenvolver sola’’, explica. Pero, como toda enfermedad, el alzhéimer no solo afecta al paciente, sino también a los que están cerca, por lo que Mariela Guerra recomienda tener fortaleza para no dejarse llevar en este viaje sin regreso. Y como parte de los consejos brindados en la APEAD, Carlos Vera Tudela, con sus 78 años, aún trabaja de manera parcial.

‘‘No solo me ayuda económicamente, sino psicológicamente porque uno trata de salir, cambiar de ambiente, hablar con otras personas’’, explica.

En los últimos ocho años, la enfermedad de Emilia ha avanzado de forma lenta, pero de igual manera hoy ya no se puede contar con ella. Algunos conocidos incluso han pasado a ser tan solo extraños. ‘‘Su carácter ha cambiado, ya no es la persona que era’’, señala Carlos. ‘‘Está físicamente, pero ya no es ella’’.

Cuando Carlos habla parece ser consciente de lo que vendrá. “Lo único que puedo hacer es continuar apoyando a Emilia. Hay que hacer frente nomás”.

Prevalencia

- La cifra. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el alzhéimer es la forma más común de demencia: llega al 60% o 70% de casos.