Regiones del norte vulnerables por falta de planificación y obras
Post El Niño Costero. Decano nacional del CAP, Arturo Yep, señaló que de registrarse un fenómeno climatológico, La Libertad, Piura y Lambayeque estarían en las mismas condiciones que cuando soportaron las lluvias de 2017.
De registrarse un nuevo evento climatológico, las regiones del norte de Piura, La Libertad y Lambayeque se encontrarán en las mismas condiciones que cuando azotó el Fenómeno de El Niño Costero, expresó el decano nacional del Colegio de Arquitectos del Perú (CAP), Arturo Yep Abanto, quien lamentó la falta de un trabajo de planificación y ejecución de obras que mitiguen el riesgo de las lluvias.
A casi tres años de El Niño Costero, el avance de las obras de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios (RCC) es muy lento, sin haber logrado mejorar las condiciones de vida de la población damnificada.
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Es por eso que Yep enfatizó que falta que los políticos escuchen a los técnicos, a fin de tener resultados exitosos como en Chile, cuya recuperación –después del terremoto y tsunami que dejó 220 mil familias afectadas– se logró en cuatro años.
“No hay obras ni acciones de previsión material, además el Gobierno no encontró a los técnicos adecuados para la planificación territorial que es fundamental en la reconstrucción del país”, recalcó.
En su análisis, Yep precisó que se habló de planificación económica como si fuera una planificación territorial, para luego cambiar el concepto a planificación urbana integral y no considerarse el plan maestro de reconstrucción con la finalidad de dar seguridad a la ciudad y mitigar el riesgo.
“Esta situación nos dibuja un panorama como si no supiéramos planificar”, anotó.
Documentos de gestión
En ese contexto, refirió que la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios se creó desde el punto de vista conceptual y filosófico, es decir, a favor de la ejecución de obras, por lo que el Gobierno nacional aprobó partidas presupuestales a través de la RCC.
“Siempre se habló de conceptos económicos y se aseguró contar con presupuesto para distribuirlo a los gobiernos regionales”, remarcó.
Empero, señaló que los proyectos deben enmarcarse en la planificación territorial. “Ahora nadie hace un proyecto, de cualquier modo tiene que haber una concepción integral. El Gobierno creyó que los hechos adversos tras El Niño Costero se resuelven con dinero, y no es así, pues se necesita una gestión territorial”, sostuvo.
Consultado qué comprende la planificación territorial, respondió que los planes de acondicionamiento territorial y los planes de desarrollo urbano. “Desde la Autoridad para la Reconstrucción se delegó funciones al Ministerio de Vivienda para ejecutar planes. En Lambayeque estamos en cero”, subrayó.
Por ejemplo, manifestó que en Chile la gestión territorial está dirigida a mitigar el riesgo. En ese sentido, indicó que resulta importante efectuar al mismo tiempo los planes maestros de la reconstrucción. Entre ellos mencionó la canalización de aguas en la zona urbana, el drenaje pluvial y la designación de áreas para la construcción de viviendas seguras.
Asimismo anotó que los gobiernos regionales deben tener un órgano de asesoramiento para tomar acciones y ejecutar las obras.
