José Víctor Salcedo
El helicóptero de la empresa Heliamérica que aterrizó sin autorización en el complejo arqueológico de Choquequirao tenía como pasajeros a dos funcionarios de instituciones encargadas de cuidar el patrimonio cultural y natural en Cusco. Realmente increíble.
En la nave estaban invitados el secretario técnico de la Unidad de Gestión de Machupicchu (UGM), Fredy Deza, y el jefe del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas en Cusco (Sernanp), Ernesto Escalante.
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Deza está a cargo de la UGM. Esta entidad establece políticas sobre turismo y conservación de la ciudadela inca de Machupicchu y coordina, según las competencias asignadas por ley, las actividades en el ámbito del santuario.
Escalante dirige Sernanp, entidad encargada de la gestión de todo el santuario nacional, que abarca más de 32 mil hectáreas.
El jefe de Sernanp reconoció ayer que estuvo en el viaje junto a Deza y otros dos invitados vinculados al turismo. “Fuimos invitadas varias autoridades para un sobrevuelo en vista que nos indicaron que es una nueva empresa que está viniendo a ofrecer algunos servicios”, señaló.
Según el funcionario, viajaron porque querían “saber si (el helicóptero) tiene las condiciones y si el impacto que genera es el permitido o está dentro de los estándares”. Aclaró, asimismo, que la invitación no señalaba un sobrevuelo a Choquequirao, por lo que habrían sido sorprendidos.
“En ningún momento se habló de una parada en Choquequirao o aterrizar en la ll’aqta. Nosotros conocemos cuál es la reglamentación. Cuando se le consultó por qué esa parada, el piloto indicó que era por un tema técnico (causado) por los vientos, que seguramente se hará más específicamente en el descargo”, explicó Escalante.
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Sabían del impedimento
Los dos funcionarios abordaron la nave pese a que conocían de la prohibición de realizar sobrevuelos y aterrizaje en ese centro arqueológico. Solo se permite el acceso de aeronaves con fines de rescate, en casos de peligro de muerte para las personas.
El Consejo Directivo de la UGM evaluará el caso. Este consejo está presidido por el gobernador regional Jean Paul Benavente, así como los ministros de Comercio Exterior y Turismo, Ambiente y Cultura.
Posición de Cultura
El titular de la Dirección Desconcentrada de Cultura del Cusco, Fredy Escobar Zamalloa, consideró que ambos funcionarios deberán explicar su presencia en el vuelo.
No obstante, aclaró que Cultura no tiene potestad para sancionarlos, por lo que las acciones administrativas y penales iniciadas solo involucran a los dueños de la empresa Heliamérica SAC.
Por otro lado, Escobar informó que un equipo de expertos (arqueólogos) viajará a Choquequirao para evaluar los daños ocasionados por el descenso de la aeronave. Ese informe servirá para reforzar las sanciones a la empresa, que deben emitirse a más tardar en 30 días.
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Heliamérica tenía plan para volar en Cusco
Días antes del aterrizaje en Choquequirao, la empresa Heliamérica anunció a través de medios nacionales que los turistas visitantes a la ciudad del Cusco podían optar por un servicio de traslado en helicóptero para volar sobre la Ciudad Imperial, Ollantaytambo, Valle Sagrado de los Incas, la ciudadela de Choquequirao, entre otros.
Destacaban que las naves sobresalían por su diseño, que incorpora fibra de carbono en áreas estructurales y también por su glass cockpit (cabina de cristal) de última generación. En cada viaje iban a llevar a seis pasajeros. Ahora, todas sus operaciones en Cusco han sido suspendidas por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).