El jueves 19 de septiembre, el juez supremo de investigación preparatoria Juan Carlos Checkley Soria dirigirá una audiencia clave para la investigación a la macro organización Los Cuellos Blancos del Puerto. El ex juez supremo César Hinostroza Pariachi pide que se le deje de considerar líder de una organización criminal y que se archiven los cargos en su contra por delito de crimen organizado.
Hinostroza Pariachi sustenta este pedido en la reciente ley 32,108 promulgada por el Congreso que establece una nueva definición del delito de organización criminal. El ex magistrado considera que los hechos que se le atribuyen no constituyen delito y tampoco demuestran que lidere un grupo criminal.
Además, presentaría como antecedente a su favor la resolución de la justicia española que descartó extraditarlo por el delito de organización criminal. Los jueces españoles consideraron que los indicios y pruebas presentados por las autoridades peruanas no tienen similitud con lo que España considera organización criminal.
Lo que resuelva el juez de investigación preparatoria, sea que rechace la solicitud de Hinostroza o la acoja, será clave para el proceso de extradición ante el reino de Bélgica, país donde el ex juez se ha refugiado, tras huir de España. Al encontrarse fuera del Perú y depender de una extradición, la definición y actos de organización criminal que se le atribuyen a Hinostroza deberán encuadrar con la legislación europea en la materia, si se quiere lograr su repatriación por este delito.
La red criminal se habría empezado a organización en la Corte Superior de Justicia del Callao
Desde que se inició la investigación del caso los CNM-Audios, el verano del 2018, la fiscalía ha trabajado arduamente en establecer qué tipo de organización es "Cuellos Blancos del Puerto", como se organizó y quién es el líder o cabecilla que dicta las órdenes y guía el grupo para lograr sus objetivos criminales.
Según el avance de las investigación, de acuerdo a documentos a los que ha tenido acceso La República, los fiscales han definido que "Los Cuellos Blancos del Puerto" son una macro organización compuesta por redes sectoriales ilícitas independientes que actúan coordinadamente.
Esta organización no tendría un solo líder, jefe o cabecilla. En la cúpula de la organización estaría un directorio o conjunto de "hombres clave", que son jefes, líderes o cabecillas de sus propias organizaciones sectoriales o personas influyentes sin organización propia.
"Ninguno de estos hombres claves es líder de la red criminal que conforman; pues, en realidad, ejercen un poder más o menos equivalente (...) con las mismas capacidades para ofertar y demandar actos ilícitos", explica la fiscalía.
La fiscal Magaly Quiroz, coordinadora del Equipo Especial que investiga a "Los Cuellos Blancos del Puerto"
La fiscalía ha identificado a 12 personas: jueces, fiscales, abogados, políticos, empresarios, que estarían en el primer nivel de la organización criminal. De ellos 9 son líderes o jefes de micro organizaciones, uno es una persona influyente sin organización propia y dos son intermediarios necesarios, pero todos con capacidad de decisión.
César Hinostroza sería uno de esos 12 jefes, líderes, cabecillas o personas influyentes del primer nivel en su condición, en su momento, de presidente de la Corte Superior de Justicia del Callao y Juez supremo titular, integrante de la Corte Suprema de Justicia.
Además, los fiscales tienen la sospecha que esta organización no habría sido liquidada el 2018 sino que sigue operativa y estaría desarrollando actos de reorganización (resiliencia), cooperando con otras organizaciones dentro y fuera del sistema judicial y captando nuevos adeptos que ni saben que lo son, pero que le ayudan a conseguir sus objetivos.
La selección, nombramiento y ratificación de jueces fue uno de los objetivos de la red de 'Los Cuellos Blancos del Puerto'
El objetivo o finalidad de esta macro organización criminal, según la fiscalía sería " tomar el control de las instituciones del sistema de administración de justicia del Estado peruano" con tres objetivos específicos:
1) administrar justicia a través de decisiones y actos jurídicos contrarios a la ley, 2) administrar el soporte operativo que permita y facilite la tarea de administrar justicia paralela, y 3) seleccionar, nombrar, designar, ascender, evaluar, supervisar y ratificar a quienes ejercen la función de administrar justicia.
Además, en la fase de resiliencia tendría dos objetivos adicionales: 4) buscar remover a los integrantes del Equipo Especial y 5) desacreditar a los fiscales ante la opinión pública, para perturbar las investigaciones.
'Los Cuellos Blancos del Puerto' tendrían una estructura organizativa similar a la Mara Salvatrucha 13
Los fiscales equiparan el tipo de organización de "Los Cuellos Blancos del Puerto" con la estructura criminal de la Mara Salvatrucha 13 (MS13) que actúa en Estados Unidos, Canadá, México, Guatemala, El Salvador, Honduras, Italia, Portugal, España.
El otro símil que encuentra para explicar su tipo de organización es con el terrorismo yihadista, con células y 'lobos solitarios' independientes, pero en cooperación mutua, que actúan en nombre del grupo sin siquiera conocer ni relacionarse con sus líderes, pero con un objetivo común.
La MS13 es una organización criminal integrada por unas 26 mil personas, organizadas, en un primer nivel, por 354 grupos denominados "ciclas", que se dividen, en un segundo nivel, en "programas", que a la vez se subdividen, en un tercer nivel, en "raflas". Se dedican especialmente al narcotráfico, extorsión, contrabando de armas, secuestro, robo, violación sexual y asesinatos por encargo.
El 2012, Estados Unidos calificó a la MS13 como una organización criminal internacional del nivel de la Cosa Nostra, la 'Ndrangheta, la Camorra y la Sacra Corona Unita de Italia; los carteles de Sinaloa, Jalisco Nueva Generación, los Zetas de México, la Yakuza japonesa, las triadas chinas. Por su extrema violencia, a partir del 2015 la MS13 es considerada una organización terrorista internacional.
En medios policiales se comenta que la MS13 intentó expandirse en el Perú. En Honduras, El Salvador y Guatemala una de sus actividades ilícitas es la extorsión a empresas de autobuses.
¿Qué tendrían en común la MS13 con 'Los Cuellos Blancos del Puerto'? Según la fiscalía están organizados de la misma manera. La MS13 y Los Cuellos operan en tres niveles y tienen varias cabezas, jefes o líderes. No tienen un mando único vertical, sino decisiones y funciones horizontales compartidas.
En el caso de los Cuellos Blancos en el primer nivel están los 12 hombres claves. En el segundo nivel están las micro organizaciones criminales en la Corte del Callao, la Corte de Lima, la Corte Suprema, el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM), la Academia de la Magistratura y los "lobos solitarios". En el tercer nivel los integrantes, que ni saben que lo son, ni conocen a los "hombres clave", pero que ayudan al logro de los objetivos al hipotecar sus funciones o comprar los beneficios de la organización.
César Acuña Peralta habría financiado la expansión de la red de corrupción, según la fiscalía.
Según el avance de las investigaciones "Los Cuellos Blancos del Puerto" habrían empezado a operar el año 2009 en la Corte Superior del Callao, al mando de César Hinostroza. El 2011 se relacionó y entabla una alianza estratégica con la presunta red criminal del empresario Mario Mendoza, que operaba en la Corte Superior de Justicia Lima.
El 2013 se integra a la red del Callao, Walter Ríos Montalvo y desarrolla alianzas estratégicas con redes de corrupción en la municipalidad del primer puerto del país.
A partir del 2014, había entrado en fase de desarrollo y fortalecimiento. Primero, en el CNM, a través de Willy Serrato y Julio Severino, quienes habrían logrado, dice la fiscalía, que el hoy gobernador regional de La Libertad y líder del partido político Alianza para el Progreso, César Acuña Peralta y su hermano Humberto Acuña, financien y den respaldo político las candidaturas de Iván Noguera y Guido Aguila.
Luego, a partir del 2015, en la Corte Suprema de Justicia, primero, para coordinar el nombramiento como jueces supremos de César Hinostroza y Ángel Romero. Una vez que logran el ascenso de estos magistrados, Hinostroza deja la jefatura de la micro organización del Callao en manos de Walter Ríos, aunque sigue manteniendo una fuerte influencia.
Eso da inició a la fase de consolidación y ramificación de la macro organización. El entonces juez supremo habría empezado a crear su propia micro organización en la Corte Suprema, para lo que se relaciona, a través de Edwin Camayo Valverde, con Edwin Oviedo Picchotito, presidente de la Federación Peruana de Fútbol.
En paralelo, en el desaparecido CNM se crea una sub red criminal, donde cada consejero era jefe, integrantes y cooperante. Paralelamente, Hinostroza también habría creado una micro organización en la Academia de la Magistratura y desarrolla alianzas estratégicas con la organización criminal infiltrada en el partido político Fuerza Popular. A su vez, la red del CNM habrían desarrollado un alianza estratégica con el grupo de José Luna Gálvez, de Podemos por el Perú.
Pedro Gonzalo Chávarry, ex fiscal de la Nación
La fiscalía destaca que el Ministerio Público habría sido inmune a este cáncer, salvó un elemento. El ex fiscal de la Nación y fiscal supremo Pedro Gonzalo Chávarry se habría integró al primer nivel de la organización como un "lobo solitario" al servicio de la mafia, pero sin lograr formar su propia red criminal, "hasta donde se conoce".
Dado que el caso aun está en investigación y se considera que "Los Cuellos Blancos del Puerto" siguen activos y resilientes, las fuentes, no descartan que más adelante se identifiquen a otros "lobos solitarios" actuando en el Ministerio Público. Por ejemplo, la ex fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
En los documentos de trabajo no se habla del ex fiscal superior y ex presidente de la Junta de Fiscales Superiores del Callao, Carlos Sáenz Loayza, condenado por ofrecer influencias, en la época de Walter Ríos, a una presunta organización criminal que operaba en la municipalidad del Callao.
Sáenz Loayza se salvó de ir a prisión pues en su caso, la Corte Suprema de Justicia si aplicó la Ley Soto. Lo condenaron a seis años de prisión por tráfico de influencias y patrocinio ilegal. En apelación, la Corte Suprema aplicó la Ley Soto y declaró prescrito el delito de patrocinio ilegal con lo cual, la pena se redujo a cuatro años de pena condicional. Después, recién hubo el acuerdo plenario para considerar inconstitucional la Ley Soto .
Si se incluye el caso de Sáenz Loayza, el Ministerio Público no habría sido tan inmune a la influencia corruptora de la mafia de "Los Cuellos Blancos del Puerto".
Ahora, lo que corresponde es que el Equipo Especial "Cuellos Blancos del Puerto" pueda probar la existencia del modelo de la MS13 en la mencionada red de corrupción judicial. Si lo logra habrá sentencias condenatorias importantes, sino algunos delitos podrían prescribir para cuando los principales implicados en este caso lleguen a juicio, en un proceso que ya dura siete años.