En esta semana de conmemoraciones por el Día Internacional de la Mujer, el Congreso, dominado por el fujimorismo, sus aliados y satélites, incumplió un compromiso para realizar un denominado Pleno Mujer, sesión plenaria dedicada a proyectos de ley considerados favorables a las integrantes del género femenino. En cambio, aprobó inhabilitar del Estado a Inés Tello por considerar su edad, más de 75 años, y desempeñarse como miembro de la Junta Nacional de Justicia (JNJ) eran una falta grave.
El Pleno Mujer era preparado para el jueves 7 de marzo, una día antes de la conmemoración internacional. Era un bloque de la agenda de la sesión plenaria para proyectos de ley seleccionados en la Junta de Portavoces. Sin embargo, tampoco eran especialmente expectantes. Estaba un proyecto para declarar de interés nacional el fortalecimiento de los Centros de Emergencia Mujer (CEM); y otro para incorporar al Ministerio de la Mujer como una de las entidades que de cuenta del cumplimiento de políticas nacionales sobre trata de personas. Es decir, apuntaban a dar una ley declarativa, sin mayor efecto que una expresión pública, y una norma sobre monitoreo de labor del Estado.
Los dos proyectos, además, estaban registrados como iniciativas de las bancadas de Alianza para el Progreso (APP) y Renovación Popular, agrupaciones afines al fujimorismo y más identificadas con sectores conservadores.
También estaba en la agenda un proyecto para dar licencia por paternidad, es decir, para que los padres también asuman el cuidados de sus recién nacidos y no solo lo hagan las madres. Esta propuesta viene de iniciativas de Fuerza Popular, Somos Perú, Acción Popular, Bloque Magisterial, Perú Bicentenario y APP.
Sin avance. Bancada de Avanza País se suma a bloque de derecha. Foto: difusión
Se sumaba una propuesta para prohibir que menores ingresen a centros de acogida que no tengan acreditación del Estado, que había quedado de la agenda anterior. Esta vez, la iniciativa también proviene de Renovación Popular.
Otras propuestas que vienen de sectores críticos al fujimorismo, sus satélites y al fujicerronismo, que une conservadores de derecha y de izquierda, se quedaron en larga espera como los proyectos para garantizar la entrega de kits de emergencia a víctimas de violación sexual, ley contra el acoso político, despenalización de aborto en casos de violación, entre otros.
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El proyecto de ley 1765, que plantea sancionar a quienes incumplan con entregar a las víctimas de violación el kit de emergencia, que incluye el anticonceptivo oral de emergencia, fue presentado por la congresista Ruth Luque, de la bancada de Cambio Democrático-Juntos por el Perú, en abril del 2022. Desde entonces, logró avanzar hasta aprobarse en la Comisión de Justicia un año después, pero en noviembre último, la fujimorista Rosangella Barbarán planteó que vuelva a la comisión y lo consiguió.
El proyecto de ley 954, que propone despenalizar el aborto en casos de embarazo tras una violación, fue presentado también por Luque en diciembre del 2021. La Comisión de Justicia tiene dictamen que recomienda archivarlo.
El proyecto de ley 2735, que plantea reconocer el derecho al cuidado y crear el Sistema Nacional de Cuidados, fue presentado por el Ejecutivo en julio del 2022, en la gestión de Pedro Castillo. La propuesta está en las comisiones de Constitución y Mujer y no tiene ningún dictamen, pese a que beneficiará a miles de mujeres, sobre todo a las más vulnerables.
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También está demorando el proyecto 1491 que busca el fortalecimiento de la prevención y sanción del acoso de las mujeres en la vida política, planteado por Luque en marzo del 2022. Tiene dictamen favorable desde julio del año pasado, pero hasta ahora no se ve en el Pleno. Al modificarse en la Comisión de Constitución, presidida por el fujimorismo, perdió fuerza sancionadora respecto al original, pero la autora espera “poder lucharla” cuando se vea en el Pleno.
Ultras. Renovación Popular tiene varios fundamentalistas en sus filas. Foto: difusión
“Existen diversas iniciativas para mejorar o fortalecer la lucha contra la violencia hacia las mujeres y niñas, pero muchas veces no son prioritarias pues a veces pesan otros temas que están marcados por lógicas más conservadoras como el tema del aborto en casos de violación sexual”, dice la congresista Ruth Luque, de Cambio Democrático-Juntos por el Perú.
“A veces otros proyectos demoran un tiempo y se generan ‘peros’ innecesarios en su debate y obvian que pueden ser transcendentales, como el proyecto de ley sobre sistema de cuidados, prohibir el matrimonio infantil que logró consenso, pero su debate en la Comisión de Justicia no fue tan fácil”, dice la parlamentaria.
La congresista Flor Pablo, no agrupada, destaca que en este Parlamento no se aprueban o se demoran bastante con proyectos de ley “que beneficiarían a miles de mujeres”, pero aprueban otras iniciativas que resultan perjudiciales, motivados por agendas de fundamentalistas .
“Es un peligro este Congreso. Hay grupos ultraconservadores que hacen distorsión del enfoque de género, por ejemplo (...). Además, no se toman acciones para erradicar la violencia sexual. Seguimos creciendo en violencia”, dijo Pablo el último jueves 7 en la emisora RPP.
La Comisión de la Mujer del Congreso es presidida por la parlamentaria Milagros Aguayo, integrante de colectivos ultraconservadores. Ella misma ha impulsado iniciativas contra el aborto terapéutico y que afectarían políticas especiales sobre mujeres e igualdad de género.
El mes pasado, esta comisión aprobó un predictamen que plantea modificar el nombre del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp) para que se denomine Ministerio de la Familia y Poblaciones Vulnerables. Tuvo el respaldo de Fuerza Popular, APP, Renovación y Avanza País. Está para debatirse en el Pleno.
M. Aguayo preside Comisión de la Mujer. Foto: difusión
El Ministerio de la Mujer y organizaciones civiles como Promsex, Amnistía Internacional, Flora Tristán, Demus y Manuela Ramos han expresado su rechazo sobre esta propuesta.
“(Buscan) quitarle institucionalidad a los derechos de las mujeres y centrar la protección en la familia, cuando la discriminación estructural y la violencia que vivimos las mujeres no solamente se dan en entornos familiares, sino también en espacios públicos”, dijo Liz Meléndez, directora ejecutiva de Flora Tristán a Infobae.
Ruth Luque, congresista de CD-JP
“Existen iniciativas para mejorar o fortalecer la lucha contra la violencia hacia las mujeres y niñas, pero muchas veces no son prioritarias, pues a veces pesan temas marcados por lógicas más conservadoras”.
Flor Pablo, congresista (no agrupada)
“Es un peligro este Congreso. Hay grupos ultraconservadores que hacen distorsión del enfoque de género, no se toman acciones para erradicar la violencia sexual. Seguimos creciendo en violencia”.
Amelia Alegría, secretaria de Organización de CGTP
“Vemos en este Congreso políticas que se quieren implementar, algunas para desmantelar o desmontar las que ya habíamos avanzado y otras con un enfoque fundamentalista religioso. No podemos permitirlo”.
Liz Meléndez, directora ejecutiva de Flora Tristán
“(Hay) una serie de resistencias. El poder patriarcal no cede con facilidad los privilegios que detenta y la rabia es una respuesta que se traduce en más violencia contra las mujeres, insultos y estigma”.