En la 78 Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), que se realiza en Madrid, el Consejo de la Prensa Peruana (CPP) dio cuenta de un incremento de la agresividad hacia el periodismo desde los actores políticos, principalmente el Poder Ejecutivo. Las medidas restrictivas del Parlamento, agresiones físicas en regiones y acciones de amedrentamiento desde el sistema de justicia también fueron parte de un informe que será debatido para su aprobación este domingo.
“Yo creo que este es el peor momento que estamos viviendo en el Perú, desde la caída del régimen fujimorista, en el año 2000″, comentó ayer, en su intervención, María Eugenia Mohme, presidenta del CPP.
La también vicepresidenta regional de Libertad de Prensa de la SIP en el Perú recordó que el país tuvo unas elecciones presidenciales muy polarizadas y, desde el inicio de su gobierno, Pedro Castillo ha desarrollado un estilo de gestión con permanentes ataques hacia el periodismo. Esto, en un contexto en el que el mandatario enfrenta siete investigaciones por presuntos actos de corrupción.
En su opinión, Pedro Castillo y el jefe del gabinete ministerial, Aníbal Torres, son los “principales enemigos de la prensa”, por el permanente mensaje que emiten para descalificar a los medios de comunicación y a los periodistas, generando una narrativa con cierta aceptación en un sector de la ciudadanía.
Asimismo, cuestionó el reiterado discurso de Castillo para azuzar a sus seguidores o cercanos al partido de gobierno para atacar a la prensa, situación que ha devenido en ataques incluso físicos contra algunos periodistas.
“Miramos con muchísima preocupación hacia dónde estamos caminando como país (...) Estamos, realmente, en el Perú, muy preocupados con lo que está pasando”, apuntó.
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Uno de los casos más graves que reportó María Eugenia Mohme ante la organización internacional está relacionado con lo ocurrido en Chota, cuando periodistas de América Televisión fueron secuestrados por ronderos y estos los obligaron a emitir un mensaje nacional, para lo cual el canal se vio obligado a interrumpir su programación.
Según alertó, este tipo de situaciones puede generar temor en los periodistas, cuando se trata de viajar a determinadas jurisdicciones, dada la agresividad hacia la prensa.
Sobre el tema, a través de un video que difundió el CPP, el especialista Andrés Calderón, autor de la reciente publicación Polítika vs. Prensa: una relación tóxica en tiempos convulsionados, alertó de cierta pasividad o condonación de la ciudadanía en relación a los ataques (ver segundo Enfoque).
El CPP entregó a la SIP un informe en el que consignan 22 hechos reportados como ataques al periodismo en lo que va del 2022. Siete de estos incidentes corresponden al discurso de Castillo contra los medios y la reciente conferencia de prensa que hizo en Palacio únicamente con corresponsales de medios internacionales; esto a pesar de ser un tema relevante para el país, como la denuncia constitucional tramitada por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides.
El documento también contempla el desempeño de la expresidenta del Congreso María del Carmen Alva, quien evitó el acceso físico de los periodistas a las instalaciones de dicho poder del Estado sin mayor justificación. Recién en junio se permitió el ingreso pero con restricciones en el aforo.
Otros hechos dados a conocer provienen del Ministerio Público. Por un lado, el pedido que hizo un fiscal para el levantamiento del secreto de las comunicaciones del periodista de investigación Ernesto Cabral. Por otro, la solicitud de una fiscal a un programa de Piura TV Canal para que revelaran la identidad de una fuente.
Este documento todavía es materia de análisis y el domingo será debatido para su aprobación, junto con otros pronunciamientos públicos.
En la asamblea de ayer también se dio a conocer el Índice Chapultepec de Libertad de Expresión y de Prensa, donde Perú reporta cuatro puntos de descenso en posiciones, siendo la cifra más alarmante en caída, junto con el vecino país de Chile.
El Índice Chapultepec es un instrumento que contempla varios indicadores para medir la libertad de expresión y de prensa en los países. Canadá es el país más valorado en términos de libertad y la peor situación se presenta en Nicaragua.
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Según el Índice Chapultepec de Libertad de Expresión y Prensa 2021-2022, Canadá y Jamaica son los países con mayor valoración en el respeto a la libertad de prensa.
El peor país es Nicaragua, donde se reportaron más de 300 agresiones contra periodistas y más de 700 ataques a los medios, todos atribuidos directamente al Estado. A ello se suman 84 casos de periodistas que se vieron obligados a abandonar su país.
Sobre Cuba y Venezuela, la SIP advierte que “continuaron las persecuciones judiciales y la violencia contra la prensa. En Venezuela disminuyó ligeramente la cifra de violencia, pero hubo un homicidio de un comunicador popular”.
Enfoque. Zuliana Lainez, presidenta de la ANP
Estamos viviendo una época de regresión para la actividad del periodismo en el país. No solo por los ataques que vienen desde el Poder Ejecutivo, sino también por la amenaza del Poder Legislativo y la propia instrumentalización del sistema de justicia en el país.
No veíamos hace mucho tiempo que hubiera cordones policiales para impedir que un periodista pueda recoger declaraciones de funcionarios sobre temas de altísimo interés público. No teníamos amenaza a la actividad periodística desde el ámbito legislativo, como podemos contarlas hoy, con los proyectos de ley que pretenden criminalizar la difusión de información sobre investigaciones fiscales.
Perú, además, es un país que tiene un promedio de treinta periodistas querellados, a nivel nacional, por año: 150 en los últimos cinco años.
Finalmente, hay especial preocupación por dos regiones. En Ica tenemos un gobierno regional que persigue y ataca periodistas y en Ayacucho el gobernador regional electo es un persecutor judicial de periodistas.
Enfoque. Andrés Calderón. Tribunal de Ética-CPP
Durante el último año de gobierno se ha ido deteriorando la libertad de expresión, no solamente por ataques frontales de los actores relevantes, sino también por una caída en la valoración que tiene la ciudadanía respecto de la relevancia de este derecho fundamental para la sociedad y para la subsistencia de una democracia.
Tenemos una normalización de iniciativas legislativas del Ejecutivo y del mismo Congreso contra la libertad de expresión. Y también tenemos muchos ataques, algunos físicos y otros narrativos, contra el ejercicio profesional del periodismo, y en alguna medida una especie de condonación de estos ataques por parte de un sector de la ciudadanía.
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El gobierno de Pedro Castillo se está presentando como el principal enemigo frontal de la libertad de expresión y la libertad de prensa en el Perú, a través de afrentas públicas y también minimizando su rol, con actitudes como la negativa para dar entrevistas o limitar la presencia de periodistas en conferencias de prensa.
Infografía - La República
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