El nuevo aliado de Keiko Fujimori dijo que si la candidata ganaba las elecciones le pediría instaurar una política de "tratamiento" a los homosexuales., El pastor evangélico Alberto Santana que apoya a la candidata Keiko Fujimori, afirmó que de llegar al gobierno le pedirá que instaure una política nacional para "curar" a los homosexuales, pese a que estas terapias han sido ampliamente rechazadas por la comunidad médica. PUEDES VER: Grupo religioso que citó a Keiko fue creado tras la primera vuelta Tras señalar que "el hombre ha sido hecho para ser hombre, no para ser mujer", Santana dijo que le pediría a la candidata de Fuerza Popular que haga que el Ministerio de Salud realice "terapias de conversión" para que las personas dejen de ser homosexuales. "Sí se puede curar. Se necesita un tratamiento para que de esta manera ellos puedan restaurarse. (...) Un homosexual no vive feliz", afirmó en una entrevista con América Noticias. Santana, presidente de la Coordinadora Cívica Cristiana por Valores, se ha convertido en una piedra en el zapato de la candidata. Poco después de firmar un compromiso contra la unión civil, tuvo que salir a rechazar los calificativos homofóbicos vertidos por su nuevo aliado. ¿Qué dice la comunidad científica sobre la homosexualidad? Para la Organización Mundial de la Salud (OMS) la homosexualidad como orientación sexual no es un desorden por lo que la eliminó de su listado de enfermedades mentales. De hecho, lo que sí considera un desorden es la "orientación sexual egodistónica" que se refiere a cuando un individuo rechaza su propia orientación sexual. Una visión similar tiene Asociación Estadounidense de Psiquiatría, que señala en su "Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales" a este transtorno como la "angustia persistente y marcada por la propia orientación sexual". Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud advirtió contra los servicios que pretenden "curar" las orientaciones sexuales recordando que carecen de justificación médica y representan un peligro para la salud. Así, la homosexualidad es vista por el concenso científico como una variación natural de la sexualidad humana y no como un transtorno o enfermedad.,
