El cardenal Pedro Barreto se refirió a los problemas entre el Ejecutivo y el Legislativo y negó que eventualmente acepte ser el mediador entre ambos poderes. Además, alertó que las diferencias terminarían llevando al país a la ruina.
“Jesús, en su época, también había división de los poderes: el religioso, político y empresarial, y él decía: ‘todo reino dividido va a la ruina’. Esta división que vive el país, es un país que va a la ruina. Estamos cerca de cumplir 200 años de independencia y la historia es una historia de corrupción desde el principio”, dijo a radio Nacional.
“¿Qué cosa hay detrás de esa división? ¿Qué la motiva? En toda división hay intereses de grupo. Allí está la pugna, no se busca el bien de todo el Perú. Son intereses de grupo, de ideología, sea de derecha o de izquierda”, agregó el cardenal Barreto.
En otro momento, el cardenal Barreto indicó que existe una política partidista de grupos que buscan el poder con motivaciones subalternas que llevan a uno a preguntarse por qué hay ansia desmedida de servir políticamente. “Estamos viendo que la política es para servirse de la política del poder que el pueblo le da para beneficio personal o para beneficios de grupo", sentenció.
Asimismo, enfatizó en que no aceptaría ser el mediador entre el Ejecutivo y el Congreso y aseguró estar convencido de que en el país hay instituciones y que “no es el presidente del Congreso, o del Poder Ejecutivo, o del Poder Judicial, o los nuevos candidatos que puedan haber (los que) van a salvar al Perú. O nos salvamos todos juntos o nada”.
Finalmente, alertó que es urgente que en el país se agilicen los procesos de diálogo alturado y respetuoso por el bien del Perú.