"La identificación de la imagen de Reggiardo con la seguridad, el comprensible tema estrella de estos tiempos, es fuerte, y nadie se la está peleando realmente".,¿Por qué Renzo Reggiardo encabeza la intención de voto a la alcaldía de Lima con 16%? Quizás es la combinación de una larga trayectoria en el tema de la seguridad y una imagen juvenil. Esto viene bastando para darle una ventaja importante sobre sus tres seguidores más cercanos, todos de la tercera edad, con imágenes bastante jugadas en los mentideros de la política. La identificación de la imagen de Reggiardo con la seguridad, el comprensible tema estrella de estos tiempos, es fuerte, y nadie se la está peleando realmente. A nadie le interesa que este no sea propiamente un tema municipal. Quizás los simpatizantes del candidato quieren que también lo sea, y que él pueda lograrlo. Algo más bien improbable. Si esa fuera la competencia, Reggiardo podría dormir más o menos tranquilo. Pero hay más factores, sobre todo una fuerte dispersión del voto entre 11 candidatos y 27% que en la encuesta Ipsos está por “otros”, “en blanco”, “ninguno” y “no precisa”. Cifras comprensibles en una elección tan sosa, y que fácilmente podrían voltear los resultados el día mismo de la votación. ¿Hacia dónde las podrían voltear? Una posibilidad es que lo hagan hacia lo impredecible. El descontento que ese 27% revela no necesariamente anuncia un bolsón de última hora hacia el puntero o alguno de sus seguidores. Hay allí votos suficientes como para construir un favorito en el tramo final. Algo que hemos visto en otras ocasiones. Otro escenario posible es que ese 27% se reparta de manera más o menos pareja entre los 11 candidatos, dándole al ganador un margen de victoria muy ajustado. Esto es algo que pesaría en la gestión del nuevo alcalde, y la razón por la cual en otros escenarios hay segundas vueltas para contrarrestar la dispersión del voto, que es el signo de esta elección en Lima. El primer lugar de Reggiardo se entiende, pero el segundo puesto de Ricardo Belmont nos parece un enigma. Debemos suponer que el provecto candidato encarna la idea de que todo tiempo pasado fue mejor, y que lo puede seguir siendo. Es interesante advertir que Belmont inauguró la era de los independientes en nuestra política, cuando hermanón significaba otra cosa.