El ministro de Economía, Luis Caputo, ratificó que el objetivo del Gobierno de Javier Milei “sigue siendo llegar una dolarización”, en medio de una inflación que “está subiendo un 1% diario” por la “la peor herencia de la historia”, en referencia al gobierno de Alberto Fernández, en una entrevista a La Nación+.
“Estamos apuntando a resolver la catástrofe heredada. El objetivo sigue siendo el mismo, llegar a una dolarización. El Presidente no miente, me gustaría que quede claro, porque hay que tener un contrato de verdad con la gente”, expresó Luis Caputo.
Caputo señaló que no es exagerado dar mensajes duros sobre la inflación, ya que “si anualizás los últimos 15 días, ya estamos en una inflación de 3700%, a razón de 1% diario”.
PUEDES VER: El país de Sudamérica que ganó como mejor destino líder, cultural y gastronómico del mundo
El ministro señaló que tanto la dolarización como el cierre del Banco Central de Argentina “siguen siendo las banderas” del gobierno de Milei para “controlar el caos”.
“El corazón del programa siempre fue fiscal, mi coincidencia con el presidente en esto fue absoluta, siempre dijo y reconoció que, dados los 20 puntos de financiamiento del déficit con emisión monetario, se hacía muy difícil salir del cepo —expresó Caputo—. Dentro del programa de estabilización tenemos esta ancla fiscal necesaria para disminuir la inflación y el complemento lo ha hecho el Banco Central con las medidas de índole monetaria. Estamos garantizando la independencia del Banco Central y reduciendo la emisión”, detalló.
Asimismo, señaló que la Secretaría de Legal y Técnica está trabajando en un decreto de desregulación abarcativo: “Busca simplificar la vida. Apunta a eso, a transparentar cosas que hoy todos sabemos que son medio turbias”.
PUEDES VER: Gobierno de Javier Milei anuncia sanciones “severas” a quienes corten de avenidas por protestas
Finalmente, Caputo desestimó una devaluación del peso en el corto plazo: “El tipo de cambio se lo llevó prácticamente al tipo del dólar libre, a sabiendas de que iba a venir una inflación del 20%, para poder contener esa inflación reprimida. Porque si nosotros lo subíamos a 500, la inflación iba a venir igual”.