La estatal china Nonferrous Trade Co. Ltd ha comprado Mineração Taboca, la empresa brasileña que controla la mayor reserva de estaño del país, en un acuerdo valorado en 340 millones de dólares. La mina de Pitinga, ubicada en el estado de Amazonas, alberga minerales estratégicos como estaño, niobio y tántalo, esenciales para la industria de alta tecnología. La compra se enmarca en la creciente presencia de empresas chinas en el sector minero brasileño y de América Latina.
Sin embargo, no todos ven con buenos ojos dicha adquisición. En este sentido, el senador Plínio Valério ha expresado su oposición a la venta y señaló que esta representa riesgos para la soberanía de Brasil. La transacción, aunque considerada estratégica por Mineração Taboca, está sujeta a condiciones regulatorias que deben cumplirse antes de su ejecución.
La compra de Mineração Taboca por parte de Nonferrous Trade Co. Ltd, filial del grupo China Nonferrous Metal Mining, fue oficializada el 26 de noviembre. Este acuerdo otorga a la empresa china acceso a la mina de Pitinga, que se considera una de las más ricas del mundo, con una vida útil estimada de 100 años.
Mineração Taboca, que ha estado bajo control de la empresa peruana Minsur durante 16 años, destaca por su capacidad de producción de estaño y su infraestructura, que incluye una planta hidroeléctrica para garantizar el suministro energético. La empresa ha manifestado que esta venta le permitirá acceder a nuevas tecnologías y mejorar su competitividad en el mercado.
La transacción ha suscitado críticas en el ámbito político, en especial del senador Plínio Valério, quien ha señalado que la venta de la mayor reserva de estaño de Brasil a una empresa china pone en riesgo la soberanía nacional. Valério ha instado a la población a estar alerta ante la entrega de recursos estratégicos a potencias extranjeras.
Asimismo, ha anunciado su intención de buscar vías legales para impedir que la compañía china explote estaño en la reserva de Amazonas, ya que asegura que el monopolio de estos recursos debería pertenecer al Estado brasileño a través de la estatal INB (Industrias Nucleares de Brasil).
La mina de Pitinga es reconocida por su producción de estaño, niobio y tántalo, que son cruciales para la fabricación de componentes en la industria aeroespacial y electrónica. Estos minerales son esenciales en la producción de cohetes, satélites y dispositivos médicos, lo que aumenta la importancia estratégica de la mina.
La mina, ubicada a aproximadamente 300 km al norte de Manaos, ha sido un pilar en la economía local y nacional. Su explotación ha generado empleo y desarrollo en la región, aunque también ha planteado desafíos en términos de sostenibilidad y protección ambiental.