El atentado fallido contra la Corte Suprema de Brasil es un hecho "triste y grave" que debe ser investigado por las fuerzas de seguridad, declaró este jueves el vicepresidente del país sudamericano, Geraldo Ackim, presente en la COP29.
"Es triste y grave. Triste por la pérdida de vidas. Grave porque es un atentado contra una institución de la República, el poder de la República, y debe ser investigado con extrema rapidez y rigor" declaró a periodistas a la salida de una reunión durante la conferencia de la ONU sobre el cambio climático.
Un hombre cargado con explosivos murió la víspera después de tratar de ingresar en el Supremo Tribunal Federal de Brasilia, en un ataque fallido menos de dos años después de una asonada contra el presidente Inácio Lula da Silva en el mismo lugar.
"Es permanente el trabajo en el sentido de reducir estas violencias, estos actos absurdos que comprometen la paz, la democracia y la seguridad. Tenemos instituciones sólidas y la investigación será rigurosa" añadió el vicepresidente al ser preguntado sobre el riesgo de desestabilización.
El atentado se produjo antes de que Brasil acoja la semana que viene en Rio de Janeiro la cumbre de líderes del G20 y de una visita de Estado del presidente chino, Xi Jinping, a Brasilia.
Lula no acudió a la 29ª conferencia de la ONU sobre el cambio climático y en su lugar estuvo Ackim, que este jueves se reunió con el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliev, antes de concluir la visita oficial.