Las subastas de objetos históricos y raros siempre han fascinado al público, especialmente cuando se trata de especies de animales extintos. Precisamente, una subasta reciente en Nueva Zelanda reavivó la curiosidad global al vender una pluma de un ave extinta por más de US$28.000.
La pluma subastada pertenecía a una especie que se extinguió en 1907. Asimismo, este acontecimiento ha despertado un renovado interés en la historia y la importancia de especímenes como este en la cultura de Nueva Zelanda.
La pluma más cara del mundo perteneció a la huia (Heteralocha acutirostris), un ave endémica de Nueva Zelanda. Con su plumaje negro y blanco distintivo y su pico largo y curvado, la huia era una de las aves más emblemáticas del país.
Desafortunadamente, fue declarada extinta en 1907 debido a la caza excesiva y la pérdida de hábitat. La huia era altamente valorada por los maoríes, y sus plumas eran un símbolo de estatus y prestigio, por lo que eran reservadas para la realeza y los jefes tribales.
Las plumas de huia eran tan estimadas que se convirtieron en regalos preciados que se intercambiaban en eventos importantes. En ese sentido, su extinción marcó el fin de una era para la cultura maorí, y sus plumas restantes se han convertido en tesoros históricos.
El alto precio alcanzado en la reciente subasta subraya la importancia continua de la huia en la memoria cultural y colectiva de Nueva Zelanda.
La huia es un ave nativa de Nueva Zelanda, extinta desde 1907. Imagen: Earth Life
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Las plumas de la huia tenían varios usos significativos en la cultura maorí. Principalmente, se usaban como adornos en tocados ceremoniales, conocidos como korowai, que eran llevados por los líderes y figuras de alto rango durante eventos importantes.
En esa misma línea, estas plumas también se utilizaban en rituales y ceremonias religiosas, en los que simbolizaban pureza y conexión con los ancestros.
Además de su uso ceremonial, las plumas de huia eran obsequiadas como símbolos de respeto y honor. Eran considerados regalos de gran valor y significado, dados en ocasiones especiales como acuerdos de paz o alianzas matrimoniales.
Esta tradición subraya la profunda conexión espiritual y cultural que los maoríes tenían con la huia, así como que la pérdida de la especie fuera un golpe significativo para su herencia cultural.
Integrantes de la cultura maorí en Nueva Zelanda. Imagen: Adobe Stock | IA
La reciente subasta que rompió récords tuvo lugar en Nueva Zelanda, organizada por una casa de subastas reconocida por manejar artefactos históricos y culturales de gran valor. La pluma de huia atrajo la atención de postores de todo el mundo, interesados tanto en su valor histórico como en su singularidad.
El precio final de US$28.417 superó todas las expectativas, estableciendo un nuevo récord mundial para la venta de una pluma.
Una de las últimas plumas del ave huia subastada por más de US$28.000. Foto: Webb's Auction House
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Los organizadores de la subasta destacaron la importancia cultural de la pluma, enfatizando su valor como símbolo de una especie perdida y un recordatorio de la importancia de la conservación.
Por otro lado, la pluma subastada es una de las pocas que quedan en el mundo, lo que añade a su rareza y valor. El comprador, cuya identidad no fue revelada, ahora posee un pedazo invaluable de la historia natural y cultural de Nueva Zelanda.