Un turista, que quiso darle un poco de adrenalina a sus vacaciones en Tailandia, se animó a saltar al vacío, amarrado a una cuerda, de una altura de 10 pisos. Pero la soga se soltó y, afortunadamente, el hombre cayó a un lago que había en la zona y sobrevivió de milagro. “Fue como si alguien me hubiera dado una paliza”, contó Mike, de Hong Kong.
El personal del tour Adventure Park saltó al agua y lo sacó, antes de trasladarlo a un hospital cercano. “Al principio, me dolía tanto que me mareé. Mis brazos estaban estirados, por lo que el área de mi axila estaba gravemente golpeada. No sabía cuántas lesiones tenía mientras nadaba hacia la superficie, todo lo que sabía era que me dolía el cuerpo”, añadió el joven. Nithit Intim, fundador del parque Changthai Thappraya Safari, sostuvo a CNN que cubrirá todos los gastos médicos, pero no lo indemnizarán.